FALTAN PROFESORES EN TRES ESCUELAS EJIDALES 

Portada Reynosa

Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS 

Reynosa, Tam.-  A casi dos semanas de que dio inicio el ciclo escolar2022-23, dos escuelas primarias del sector ejidal siguen sin iniciar actividades, ya que no les fueron asignados maestros por la Secretaría de Educación de Tamaulipas dependiente del gobierno del estado. 

Lo anterior lo confirmó el maestro Francisco Pineda Cuéllar, supervisor de la zona escolar No. 169, quien dijo que al momento no se ha dado respuesta a la petición que desde el primer día de clases formuló a las autoridades superiores. 

Se trata de las escuelas unitarias “Miguel Hidalgo” del ejido Francisco Villa y “Manuel Ávila Camacho” del ejido “El Grullo”, que mantienen cerradas sus puertas y más de 30 alumnos de los seis grados están en la holganza porque no hay actividades escolares. 

El funcionario educativo precisó también que otro maestro de grupo de la Escuela de organización completa “20 de mayo” del Ejido Alfredo V.  Bonfil o “Periquitos”, también se encuentra ausente, afectando a 36 alumnos que están recibiendo clases de parte del director del plantel, teniendo este que desatender sus funciones específicas. 

El día de ayer el supervisor de la Zona Escolar 159, estuvo ante su superior, el jefe del sector 27 de Educación Primaria, profesor Gustavo Villafranca Alvarado, para reiterarle la falta de estos recursos para que encamine sus gestiones ante la Secretaría de Educación en Tamaulipas, donde de momento se han hecho desentendidos, ya que se encuentran ocupados en el proceso de entrega-recepción del próximo gobierno que encabezará el doctor Américo Villarreal Anaya. 

SOLICITAN MALLASOMBRA 

Por otra parte, el maestro Pineda Cuéllar, dijo que esta semana acudirá con una comisión de padres de familia de la Escuela “Francisco I. Madero” del Ejido “El Charco”, para presentar la gestión ante Presidencia Municipal para la dotación de su malla-sombra. 

Y es que, señaló el entrevistado, esta techumbre de malla, ya venció su vida útil, pues fue instalada hace cinco años como las de otros planteles que ya empezaron a sustituirlas desde el ciclo anterior pues en el campo por los vientos predominantes, regularmente tienen una duración máxima de 4 años. 

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