Plan Estatal de Desarrollo

Opinión

Por Oscar Díaz Salazar

Aunque pueda prestarse a la simulación, y a pesar de que así ha ocurrido muchas veces, considero que es una buena práctica de los gobiernos, escuchar a los ciudadanos e implementar mecanismos para que los gobernados puedan expresar sus ideas, demandas, propuestas exigencias, reclamos y peticiones, con el propósito de elaborar un plan que señale la ruta y fije las metas deseables del quehacer gubernamental.

Me refiero al proceso de formulación de los planes de desarrollo, en particular al Plan Estatal de Desarrollo, en el que deberían estar trabajando los funcionarios de la administración estatal. A juzgar por la poca difusión que se ha dado a esta tarea, me parece que están omitiendo la fase de consulta a la sociedad y que el referido plan saldrá del trabajo de gabinete, que por muy sólido, consistente y documentado que este sea, siempre será perfectible con las aportaciones de los tamaulipecos de todos los segmentos de la población, de diferentes estratos sociales, de diversas ocupaciones y con variedad de visiones.  

Debo aclarar que no espero necesariamente que se haga lo mismo que se hizo en el pasado. Que no pido que se hagan reuniones masivas en las que se simulan las aportaciones de los ciudadanos y en las que se crean grupos de trabajo que jamás vuelven a sesionar y que solo sirven para tomar la fotografía que se muestra como evidencia de haber consultado al pueblo.  

Como participante de reuniones de consulta a la sociedad y como coordinador de grupos de trabajo encargados de elaborar planes, puedo asegurarles que eso de la inteligencia colectiva “si jala”, puedo afirmarles que además de grato, es muy ilustrativo escuchar a las personas. También puedo comentarles que hay muchas personas que desean hacer sugerencias y propuestas a los gobernantes, pero no tienen el tiempo de asistir a una reunión o no les agrada participar en eventos políticos, pero que se toman el tiempo de plasmar por escrito sus ideas y enviarlas a correos electrónicos, portales del gobierno, teléfonos celulares o redes sociales.

A juzgar por el discurso inaugural que le escuché al gobernador el primero de octubre en el recinto ferial de Ciudad Victoria, creo que tiene buenos asesores, con buenas ideas, con interesantes propuestas, pero ajenos a nuestra realidad, ignorantes de nuestra geografía, distribución poblacional, vocaciones y actividades económicas etc., y lo digo porque de ser estos asesores quienes le están redactando el Plan Estatal de Desarrollo, es de esperarse que el documento tendrá cosas positivas, mas no será el reflejo de lo que quieren los tamaulipecos.

Por otro lado, la indicación de consultar a la sociedad, los mecanismos de consulta y la integración de órganos (comités) para coordinar estos trabajos, no solo es una práctica del pasado, es también una indicación establecida en la Ley Estatal de Planeación, por lo que mientras este vigente la ley, es obligación cumplir y hacer cumplir, como lo protestó el gobernador el día de asumió el cargo. Y si esto no les parece, que deroguen la ley estatal y que busquen la manera de evadir la ley federal.  

Y si de lo que se trata es de no caer en las practicas del pasado en las que se simulaba el proceso de consulta a la sociedad y en las que los planes de desarrollo fueron letra muerta, sueños guajiros y la oportunidad para hacer un negocito con la subcontratación del documento a un Despacho de consultoría, dejenme decirles que  por lo menos en este tema, hacer nada es peor que simular.