EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Ciudad de México.- En una reveladora entrevista con la reconocida presentadora Mara Patricia Castañeda, la icónica periodista Lolita Ayala abrió su corazón y compartió detalles íntimos de su vida amorosa, confesando que su matrimonio con el periodista deportivo Jorge Berry no fue más que un “ensayo”. A pesar de los años transcurridos desde su salida del noticiero donde trabajó durante mucho tiempo, Ayala agradece los errores cometidos en aquel entonces, ya que le han brindado nuevas oportunidades laborales.
Desde su partida del noticiero hace más de 7 años, Lolita Ayala sigue siendo una figura de gran relevancia en el mundo del entretenimiento y la publicidad. Diversas marcas la convocan para ser su imagen, y recientemente lanzó una línea de productos con su rostro estampado, consolidándose como una verdadera celebridad.
Durante la entrevista, Ayala reflexionó sobre su vida amorosa y reconoció haber tenido pocas relaciones sentimentales. Contrario a lo que muchos podrían pensar, ella atribuye su falta de parejas no a una falta de interés de su parte, sino a una supuesta tendencia a ahuyentar a los hombres. “Yo fui muy poco noviera, no sé por qué, pero no, espantaba yo a los muchachos; todo mundo me dice: ‘Es que espantas a los hombres’, no sé por qué, raro, pero así fue”, comentó.
Sin embargo, Lolita Ayala no escapó del amor cuando este tocó a su puerta. Aunque confesó que no se sentía enamorada de Jorge Berry, su entonces pareja, quien la había cautivado con su insistencia y encanto, ella accedió a oficializar la relación y aceptar su propuesta de matrimonio. “Yo se lo dije antes de casarnos, le dije: ‘Jorge, no estoy enamorada de ti, mejor no nos casamos porque no estoy enamorada’, y él dijo: ‘No importa, si en un año no estás enamorada de mí, te doy el divorcio así rapidito’, y pues caí, me casé y no me enamoré”, reveló Ayala.
Estas confesiones de Lolita Ayala han dejado a muchos sorprendidos, ya que revelan una faceta desconocida de la destacada periodista. A pesar de las circunstancias de su matrimonio, Ayala continúa su camino, agradeciendo las oportunidades laborales que le han surgido gracias a su pasado y buscando la felicidad en nuevos horizontes.
