Xóchitl

Opinión

Por Oscar Díaz Salazar

Les comparto unas notas de la visita de Xóchitl Galvez a Tampico. De la conferencia de prensa celebrada en un salón de la avenida Hidalgo.

Xóchitl Galvez inició su participación comentando que era la primera vez que la recibía un grupo numeroso en el aeropuerto. Agregando que se sentía muy contenta y arropada por los tampiqueños.

El discurso de la senadora Galvez tiene como eje y modelo de lo que no debe ser, al presidente de la república. En una de las múltiples referencias al presidente, afirmó que en López Obrador no aplica la violencia política de género, pues ese concepto fue concebido para definir a la violencia del hombre sobre la mujer. Y precisamente para explicar sus constantes referencias al jefe del Ejecutivo, mencionó que “el presidente me mencionó 60 veces en mañanera y lo sigue haciendo, aunque ya se lo hayan prohibido”

Siempre ligado a lo que dice o hace el presidente, Xochitl Galvez comenta que ha subido 4 puntos en pocas semanas y eso le molesta mucho al presidente.

En algún momento aludió al gobernador Américo Villarreal diciendo que lo conoce y tiene buena relación con él, esto sin perdonarle la crítica, tangencial y de altura, cuando lo ligó a la falta de medicamento y la mala atención en las instituciones de salud pública, de lo que debería estar enterado quien fue miembro de la comisión de salud en el senado.

En cuanto al ex gobernador Cabeza de Vaca respondió que “No lo he visto, pero me llevo bien con casi todos. Me llevo bien con todos los panistas”, agregando que con quien más trato tiene es con su hermano el senador Ismael García.

Cuando el tema de la rueda de prensa celebrada en un salón del hotel Hotson fue el de la seguridad, los comentarios de la señora Galvez también fueron ligados al presidente, repitiendo que ha sido fallida la política de abrazos y no balazos. “Tropicalizó” sus comentarios, para tierras tamaulipecas, comentando que mucho le impresionó viajar por la carretera ribereña, una región solitaria, en poder del crimen organizado, por la que viajó por más de media hora sin toparse con otro vehículo.

Me negarás tres veces

Incomodidad y pena ajena se sintió en el recinto cuando un periodista le preguntó en tono de reproche por qué se hacía acompañar del ex senador José Julián Sacramento, responsable de una obra que terminó como monumento a la corrupción que por más de una década permaneció en pie -pero sin uso- a la entrada de la zona conurbada, me refiero al “Puente Roto” recientemente demolido.

La senadora lo negó tres veces, afirmó que no lo conoce.

Esta respuesta provocó que otra periodista le señalara que recientemente el ex senador Sacramento le había organizado una fiesta de cumpleaños en CDMX y que había fotografías que lo probaban.

“Juro por mis hijos que no lo conozco” fue el remate de la senadora, a una argumentación sobre la posibilidad de ser retratada con muchísima gente que no conoce.

En el pasillo que va del salón a la salida del hotel, la esperaba el senador Sacramento, negado tres veces por la aspirante, que no tuvo reservas para continuar en la comitiva de la senadora Xóchitl Galvez.

Saludé en este evento a los reynosenses Garza de Coss y Chuma Moreno, quienes asistieron por iniciativa personal y no como emisarios de Francisco N… al menos eso dijeron.

En el éxito de la visita de Xóchitl Galvez, se nota, pero no se debe ver, ni mencionar, la mano de Chucho Nader, primer panista de la zona conurbada… y de Tamaulipas, cuando sea oportuno dejarlo claro.