Los diputados «arreglados»

Opinión

Por Oscar Díaz Salazar

Le llevó todo un año en el gobierno, – a morena como jefe del poder ejecutivo del Estado -, para hacerse del control del Congreso local, con una diferencia mínima y valiéndose de las mismas «trampas» con las que los panistas les quitaron la mayoría y el manejo del órgano de dirección, y aquí me refiero a la Junta de Coordinación Política, hoy disminuida a su mínima expresión y sustituida por la Junta de Gobierno

No me consta, pero tampoco dudo, que fueron en efectivo los argumentos para reconfigurar las composiciones de los grupos parlamentarios y las alianzas que permitieron la frágil mayoría que hoy tiene morena y asociados.

De lo que sí queda constancia es de las chambas que les ofrecieron, y aceptaron, los legisladores, de las diferentes filiaciones políticas, para atender la indicaciones que les señalan desde el gobierno.

La mayoría de los diputados fueron tan obvios y tan ambiciosos, que colocaron a familiares cercanos y esposos, en esas «posiciones» que les obsequiaron para continuar con esa añeja tradición de sometimiento del poder legislativo, como institución, y de cada uno de sus integrantes en lo individual, a los dictados del gobernador y/o de sus funcionarios habilitados como encargados de los asuntos legislativos, para pastorear, disciplinar, instruir y corregir a los miembros del legislativo.

El ofrecimiento general, aceptado por la mayoría, fue la titularidad de una Oficialía del Registro Civil, empleo con nivel de Jefatura de Departamento, para la persona que fuera propuesta por los diputados.

Excepciones a ese arreglo baratero, fueron las ofertas que se hicieron a las diputadas que ya traían un historial de maromas e intercambios de fracción parlamentaria y por supuesto a la encargada de la negociación, la «líder» del grupo parlamentario de morena, la plurinominal Ursula Patricia Salazar, que «malbarató» la obediencia de sus diputados, pero que para su consorte pidió (y recibió) la rectoría de la Universidad Tecnológica de Altamira… Con el antecedente de ser profe del CONALEP.

Como verán más adelante, la diputada Ursula aplicó la máxima que señala «el que parte y reparte, se queda con la mejor parte», y lo digo porque el botín más generoso lo consiguió para el esposo, que tiene de académico lo que yo tengo de astronauta.

Les comparto un breve recuento de las conquistas de los señores diputados de Tamaulipas

Juan Ovidio García García.- Dirección Administrativa en el Registro Civil para su hijo

José Alberto Granados Fabila.- Coordinación en la Secretaría de Bienestar de Matamoros, para su hermano y una Oficialía del Registro Civil

Gabriela Regalado Fuentes.- Coordinación de SEBIEN en Nuevo Laredo, para su esposo.

Armando Zertuche Zuani,.- muy por debajo de lo que tenía con Cabeza, le dieron una Oficialía del Registro Civil.

Edgardo Melhem Salinas.- solicitó el alquiler de un inmueble en Río Bravo.

Merco Gallegos Galván.- Oficialía del Registro Civil y un espacio en Victoria

Alejandra Cardenas Castillejo.- Oficialía del Registro Civil para su madrastra

El reporte que me compartieron, señala que la diputada Nora Gómez González, está libre de pecado, nada pidió y nada le dieron.

En otra entrega les comparto lo que «arreglaron» los otros diputados.