EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Como si no hubiera sido suficiente haber sido diputados locales de la LXIII legislatura con las siglas del Partido Acción Nacional. ahora los esposos Pedro Luis Ramírez Perales y Beda Leticia Gerardo Hernández, andan haciéndole ojitos a MORENA, del que antes decían que era un peligro, para que este partido les haga el milagro de ir de nuevo a gozar las mieles del Congreso del Estado de Tamaulipas.
Sin más mérito que ampararse en la dirigencia de la Sección X del Sindicato Nacional de Trabajadores del IMSS, los zánganos de la política, después de haber servido incondicionalmente al gobierno del prófugo Francisco García Cabeza de Vaca, ahora han aparecido en los últimos meses barbeándole a gentes afines al gobernador del estado, Americio Villarreal Anaya, hablándoles al oído para que este los considere a ambos para la siguiente legislatura.
Desde el año 2016, tanto Pedro Luis como Beda Leticia, originarios de Ciudad Mante, pero avecindados en la capital Victoria, han medrado a través de las siglas sindicales, obteniendo caros políticos sin que esto represente ningún beneficio para los trabajadores del gremio que dicen representar.
Hasta el momento no se ha conocido de al menos una sola iniciativa del sector salud que haya sido realizada por estos aprendices de caciques de la política, uno de los cuales llego hace tiempo por elección mientras que su esposa se fue en la misma ola al competir por un espacio plurinominal, cargo que ocuparon sin el menor rubor a pesar de que había un impedimento por el abierto nepotismo.
Un profundo malestar existe entre los miembros del sindicato del Seguro Social de Tamaulipas, sobre todo los que son también integrantes de MORENA, ya que la mayor parte de las nominaciones a cargos públicos en Tamaulipas son ocupadas por priistas y panistas que han sembrado sus reales, dejando con un palmo de narices a los fundadores y miembros de la cuarta transformación, que solo se han quedado viendo como los despojan de su oportunidad.
Es una vergüenza que la Sección X, siga sido aún en tiempos modernos un simple trampolín político al servicio de los esposos Ramírez Gerardo, que a ultimas fechas con lo lambiscones que son, han logrado colarse hasta la oficina del gobernador del estado para plantearle su necesidad de ser nuevamente diputados de Tamaulipas como si no hubiese más personas con capacidad para ocupar esos cargos.
Ojalá y que se les impida, sino en unos meses más MORENA terminará de ser como en su tiempo fueron el PRI y el PAN, que hasta la fecha no han podido sacudirse a quienes tantos daños hicieron y siguen haciendo a la sociedad.
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