La Comuna

Opinión

 

José Ángel Solorio Martínez
RESURGEN RATERIAS DE EGIDIO TORRE
El director de la Administración del Sistema Portuario Nacional (ASIPONA), en Tampico, Tamaulipas, el Almirante Salvador Camargo Vivero, anunció la tarea para la que fue recién instalado en el recinto fiscalizado del puerto: impulsar el orden y el desarrollo en las instalaciones de la nación.
Ese anuncio, fue hecho en el marco de la ceremonia de entrega del buque de la Universidad Autónoma de Tamaulipas (UAT), que por casi dos sexenios, había estado varado en el parque fiscal de la ASIPONA.
Al acto, asistió representando a nuestra Máxima Casa de Estudios, el MVZ, rector Dámaso Anaya, quien agradeció al funcionario federal la disposición de colaborar con la Universidad y abrir la posibilidad de reinsertar en las tareas de investigación oceanográfica en aguas profundas, para lo que fue adquirida, esa embarcación, hace más de una década por las autoridades universitarias pasadas.
Varios rectores, se desentendieron de ese buque escuela, debido a que anteriores autoridades que administraron el puerto, pretendieron cobrar sumas millonarias por el uso de esa infraestructura hoy en manos de la Secretaría de la Marina (SEMAR).
La embarcación, por el largo tiempo que estuvo sin actividad, presenta serias averías tanto en su exterior como su interior. La misma SEMAR, la rehabilitará para que vuelva a los mares; esto, en los talleres que posee en ese recinto fiscal la ASIPONA, administrada por el Almirante, Camargo Vivero.
¿Quiénes se pasaron de listos con la adquisición de ese buque, cuyo costo se tasó en más de 300 millones de pesos?
A juicio de lo que se maneja públicamente, y el tiempo en que estuvo sin navegar, ese bien martítimo propiedad de la UAT, fue adquirido en la administración gubernamental de Egidio Torre Cantú y en el período rectoral de Enrique Ettiene Pérez del Río.
Ni el Patronato Universitario, ni los rectores subsecuentes, y menos el gobernador, Francisco García Cabeza de Vaca, proporcionaron información financiera de esos movimientos para la compra y el abandono de ese buque.
Las autoridades universitarias en el sexenio de Torre Cantú, ni el mismo Gobierno estatal se preocuparon por echar a andar proyectos de investigación oceanográfica. Se especula, que los instrumentos de navegación y de inspección de las aguas del océano , se averiaron o sufrieron desperfectos graves por la más de una década de abandono.
El rector Anaya, dijo desconocer, el por qué otras administraciones rectorales olvidaron el uso de esos bienes. Anunció que su rectorado, retomará el proyecto para retornar a las aguas del golfo y de otras latitudes el barco UAT-1 Cidiport –es el nombre con el que se registró–, para el despliegue de actividades de indagación científica.
Reconoció el rector, la labor del Almirante, Camargo Vivero toda vez que con ello, se recuperan invaluables bienes de los universitarios y de los tamaulipecos.
En el mismo evento, el responsable de la ASIPONA, Tampico, dio a conocer el crecimiento del 5.6 % anual, al movilizar tres millones 400 mil toneladas, tanto de productos de PEMEX como de empresas privadas.
Al finalizar el acto protocolario de entrega de la embarcación, recordó la encomienda del Secretario de Marina, José Rafael Ojeda Durán:
-Me pidió tres cosas: vas a Tampico a poner orden, me das parte de todo y te cuidas.