“MAKITO” TERMINA TERCER AÑO SIN PENA NI GLORIA

Portada Reynosa

EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- La política pública es de gestionar para hacer más y mejores obras en los municipios a través del estado, pero como que al presidente municipal de este pueblo o al que cobra como tal, no sabe el camino, Reynosa se queda sin obras.
A Carlos peña Ortiz, no lo toman en cuenta porque sencillamente no solicita recursos, como que es mucho para pedir y no para él, sino para arreglar las calles que están hechas queso, literal.
No pueden dar un paso sin toparte con un bache, una zanja abierta, una calle cerrada y abandonada porque no paga a proveedores ni los servicios del agua y de energía eléctrica, todo lo quiere gratis, sino, los acusa con su mamá.
Sin lugar a dudas el pueblo de Reynosa es quien está pagando por esa egolatría y vanidoso del presidente municipal malamente abanderado por MORENA, donde no se vale mentir, robar o traicionar.
Al alcalde narcisista “Makito”, La Vergüenza de Harvard, como se le conocer en todos los barrios de Reynosa, vaya que ha mentido, porque desde la pasada campaña cuando gano la primera vez, prometió construir 6 o siete presas rompe-picos y no ha podido terminar ni una, por citar un ejemplo.
Prometió la policía municipal o aunque sea la de Proximidad en cada sector de la ciudad, como era antes, pero no pudo hacer las gestiones, quizá se confió en que su mamá le iba a hacer la chamba, pero es mentiroso, presuntuoso y vanidoso como él solo.
Reynosa está en ruinas, con las calles y cruceros vehiculares repletos de pedigüeños, pero al DIF solo lo usa como caja chica, al igual que a la COMAPA.
Mientras los reynosenses mascullan los fracasos del torpe alcalde, municipios como Matamoros, Nuevo Laredo, Miguel Alemán, Rio Bravo y hasta Valle Hermoso siguen aprovechando la coyuntura para jalar obras a través del Gobierno del Estado de Tamaulipas, en beneficio de los ciudadanos, aun en la parte final de la actual administración municipal.
Carlos Peña, acudió hoy a presentar su Tercer Informe de su infame gestión, una copia del que fue su segundo informe del año anterior, nada digno de escribir a casa; son los mismos proyectos inconclusos, las mismas promesas y el mismo fracaso.
En conclusión: “El Makito” termino la primera parte de su principado en Reynosa con etiqueta de… REPROBADO.