Por Oscar Díaz Salazar
Bastante bien le ha ido al presidente municipal de Madero, Erasmo González Robledo, con el partido y el movimiento que encabeza el personaje del que alguna vez afirmó: “es un peligro para México”, repitiendo la frase que diseñaron los estrategas políticos del partido de sus amores, el Revolucionario Institucional, para detener el crecimiento en intención del voto que tuvo en las tres ocasiones que López Obrador buscó la presidencia.
Erasmo González es un producto del “sistema”, un miembro distinguido de la familia revolucionaria e institucional. Por sus venas corre sangre tricolor. Se puede decir que desde la casa mamó la política y abrevó en el priismo que abrazó su padre, que también fue alcalde de Madero.
Desde la óptica de la teoría de redes aplicada a la política, tenemos que Erasmo González es un nodo que tuvo el gran acierto (para su éxito político) de unir los intereses de un grupo de negociantes de la obra, los suministros y los servicios públicos, con un grupo de políticos en ascenso que tomaron el control de morena, en el Estado y en el país, apalancados con el patrocinio de los hombres de negocios de la frontera, para ser más precisos de Reynosa y el Valle de Texas, y para ser exactos, “Los Muñecos”, comandados por el difunto Sergio Carmona Angulo.
Con el acceso al primer círculo de morena, con tickets para ingresar a las áreas VIP de la cuatro T, que compraron “Los Muñecos”, Erasmo González fue diputado federal en dos ocasiones, heredó del ex dirigente de morena, Mario Delgado, la Comisión de Presupuesto. A partir del primero de octubre de este año se instaló como presidente municipal de Madero.
Sobrado como es y anda, Erasmo González ha dejado correr la versión de que muy pronto pondrá un encargado de despacho para que le cuide el changarro, para irse él a un cargo de mayor relevancia. La Secretaria de Finanzas es el área donde mejor encaja, considerando su profesión de Contador Público y su experiencia como presidente de la Comisión de Presupuesto, y su competencia para manejar el billete.
Considerando la ubicación actual de su padrino y alter ego, Mario Delgado, el muñeco maderense también le hace ojitos a la Secretaria de Educación, donde podría ser muy útil para gestionar beneficios en la Federación.
Que quiera el puesto de los aliados con los que comparte origen y patrocinadores, y que se fracturen esas alianzas y amistades, era cosa de tiempo, pues las ambiciones a futuro, la pretensión de la misma novi@, convierte en enemigos a los amigos, incluso a los hermanos.
De los personajes que recibieron viáticos de los Muñecos y que se movían en carmonetas, el que menos ha sido señalado es precisamente Erasmo González Robledo, que por seis años nos veía a los tamaulipecos chiquitos y orejones, porque se movía en las grandes ligas de la política nacional. Pero se acordó que necesita de los electores de su pueblo y buscó ser presidente de su municipio.
Desde luego que deseo que le vaya bien como presidente, para que le vaya bien a los maderenses, aunque los empleos públicos comprados con dinero de procedencia turbia, que no dudosa, se utilizan para recuperar las inversiones, con utilidades muy altas.