¿De dónde salieron los más de 20 millones de pesos que costó el inmueble?
Martín Díaz / La Nube
Desde hace años, Maki Ortiz ha sido una de las figuras más influyentes en la política de Reynosa. Su nombre ha estado ligado al poder, al control del municipio y, recientemente, a la acumulación de propiedades de alto valor. Ahora, su última adquisición —un local comercial valuado en más de 20 millones de pesos— ha generado una gran controversia. No solo por el monto millonario de la compra, sino porque la senadora difícilmente podría justificar la procedencia de esos recursos con el sueldo que ha percibido como funcionaria pública. ¿De dónde salió ese dinero? ¿Hasta dónde llega su ambición por los terrenos y el poder?
Un local clave para su venganza política
El inmueble adquirido se encuentra en la calle Allende #800, en el primer cuadro de la ciudad, a tan solo dos cuadras de la Presidencia Municipal de Reynosa. Su ubicación estratégica, sumada a que cuenta con locales comerciales recién construidos y su propio estacionamiento, eleva significativamente su valor de mercado.
El precio de más de 20 millones de pesos no es un número arbitrario, sino que se basa en un avalúo realizado tomando en cuenta el valor de locales similares en la misma zona. Esto confirma que la propiedad no solo es costosa, sino que representa una inversión considerable que supera con creces los ingresos públicos que Maki Ortiz pudo haber obtenido a lo largo de su carrera política.
Además, lo que hace aún más controversial esta compra es que parece estar motivada por una venganza política, ya que el local era rentado por un familiar de un diputado local que ha sido crítico de su hijo, Carlos Peña Ortiz, el actual alcalde de Reynosa.
¿De dónde salieron los millones?
La pregunta sigue sin respuesta. Los números simplemente no cuadran cuando se compara el costo del inmueble con los ingresos que la senadora ha percibido como funcionaria pública en los últimos 8 años:
Alcaldesa de Reynosa (2016-2021)
Sueldo mensual estimado: 100,000 pesos
Total en 5 años: 6 millones de pesos
Senadora de la República (2024-presente)
Sueldo mensual estimado: 119,000 pesos
Total en 1 año: 1.43 millones de pesos
Ingreso total en 8 años: 7.43 millones de pesos
A pesar de que este monto es considerable, sigue siendo muy inferior a los más de 20 millones de pesos que costó la reciente adquisición del inmueble.
Esto ha provocado especulaciones sobre un posible enriquecimiento ilícito, especialmente en un contexto donde el gobierno federal asegura haber erradicado la corrupción. Pero si las autoridades deciden actuar, su patrimonio podría ser investigado y congelado, lo que la pondría en una situación financiera complicada.
Los antecedentes de Carlos Peña Ortiz
La historia de corrupción en la familia no es nueva. En mayo de 2022, se emitió una orden de aprehensión contra Carlos Peña Ortiz, actual alcalde de Reynosa e hijo de la senadora, por presuntas operaciones con recursos de procedencia ilícita.
El caso estuvo relacionado con la adquisición de un rancho de 1,500 hectáreas valuado en 15 millones de pesos, una cantidad que también excede por mucho sus ingresos como funcionario público.
Además, la Auditoría Superior del Estado (ASE) ha presentado cinco denuncias penales contra Maki Ortiz y su equipo de trabajo por un monto superior a 111 millones de pesos, debido a irregularidades en la adquisición de bienes y servicios durante su gestión como alcaldesa.
¿Prisión y quiebra inminente?
El desmesurado crecimiento patrimonial de la familia Ortiz no solo podría derivar en procesos penales en su contra, sino también en la pérdida de todos los bienes que no puedan justificar.
Si la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) confirma que el dinero utilizado en la compra del inmueble proviene de recursos ilícitos, la senadora y su hijo podrían enfrentar un proceso legal que termine con su detención y la confiscación de sus propiedades.
Lo que comenzó como una estrategia de expansión política y financiera para adueñarse de más terrenos y controlar el poder en Reynosa y Tamaulipas, podría convertirse en su peor pesadilla. Si la justicia actúa, la familia Ortiz podría perderlo todo: su dinero, sus bienes y su libertad.
La pregunta sigue en el aire: ¿Caerán en desgracia o seguirán impunes?
