ALBERTO LARA ENTREGA VIVIENDA A HUMILDE ANCIANITA

Portada Reynosa

Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS 

Reynosa, Tam.- Teniendo como fondo musical la canción al ritmo de pop “Todo va a Estar Bien” que canta el propio diputado local Alberto Lara Bazaldúa y que se ha convertido en un himno de esperanza para los tamaulipecos; la tarde de este viernes 4 de septiembre fue realizada la entrega oficial de una nueva vivienda para la ancianita Crescencia Ortega Vázquez. 

            La bella historia de amor al prójimo que inició el pasado 10 de mayo, (Día de las Madres), en que fue localizada doña Chenchita, gracias a una de sus más estimadas vecinitas (Silvia Sandoval Reyes) quien a través de un video reportó su angustiante viacrucis, ya que residía en una área inundable, en una barraca de madera y cartón, a punto de caer, viuda y sola; tuvo hoy un maravilloso final feliz. 

            Luego de constantes ires y venires se construyó por instrucciones del legislador obrero, una pequeña, pero muy confortable vivienda que además fue dotada de todo lo esencial, como sencillos muebles, cama y aparatos eléctricos nuevos, que le han cambiado la vida a la ancianita, que por lo pronto -dijo con singular alegría- “ya no me mojo”. 

TARDE FELIZ 

            En el sencillo acto en el que la afortunada viejecita derramó lágrimas de emoción, también el cielo lloró de felicidad con una espesa brisa lluviosa, pero fue de forma tan breve que no impidió que todos los vecinos y amiguitas de doña Crescencia, acudieran a felicitarla y a saludar efusivamente al legislador local, propulsor y gestor de esta importante obra caritativa que pone en relieve los más preciados valores humanos. 

            Lara Bazaldúa por su parte, dijo que le conmovió sobremanera la situación triste en que vivía la señora “Chenchita”, por lo que el mismo 10 de mayo de este año, luego de recibir la petición de atención por parte de la señora Silvia, acudió personalmente para obsequiarle una estufa y un refrigerador nuevos. 

            “En ese mismo momento en que constatamos la desgracia en que vivía me comprometí a título personal para derruir ese tejaban, sin tener siquiera una mascota propia; para iniciar la construcción de su casita de una sola pieza, pero amplia, limpia, suficiente y suya”. 

“PROHIBIDO RENDIRSE” 

            El dirigente estudiantil Alberto Jiménez, de la Coordinación de la Asociación Civil “Prohibido Rendirse”, fue el encargado a la cabeza de un grupo de jóvenes que son también parte de la estructura del Sindicato Industrial Autónomo de Maquiladoras de Reynosa que preside el parlamentario Alberto Lara, quienes se encargaron de tirar el cuarto anterior y bosquejar lo que es ahora la nueva vivienda. 

            Fue “El Capí” Félix Escobedo, un amigo constructor que apoya al legislador Alberto Lara, quien se encargó de hacer los preparativos para levantar la casa prefabricada sobre una estructura de unos 60 centímetros de altura que impedirá que ese pequeño, pero confortable hogar de la colonia Lucio Blanco se vuelva a inundar. 

            La tarde de este viernes 4 de septiembre, en que formalmente fue inaugurada la casita de doña Creencia, se puso a funcionar un servicio sanitario y una pequeña regadera que le otorga una nueva perspectiva para que la ancianita viva con comodidad todos los años que Dios le quiera agregar a su existencia que ya suma 83 abriles. 

UN HOGAR COLORIDO 

            El hogar cuenta con todos los colores de la primavera porque su moradora ama la naturaleza; el líder de SIAMAR, instruyó para que también la cerca que enmarca la parte frontal del perímetro fuese pintada de los mismos alegres colores. 

            Al recibir en su terreno y luego de cortarse el listón simbólico, la agradecida mujer, llorando de alegría al ver consagrado un sueño que tuvo toda su vida, dio su bendición al dirigente y luego todos los asistentes pasaron al amplio patio de la flamante vivienda, donde disfrutaron de tamales y refrescos que pusieron colofón a este sueño multicolor. 

            Actos como este elevan la grandeza de un ser humano proclive a hacer las cosas que nadie hace, que va al extremo de llevar a la peculiaridad su obra con tal de ver felices a los demás… así es Alberto Lara, un personaje de excepción y sin paralelo en Tamaulipas.