- Derechohabientes que mueren en el 270 condenados a la incineración
Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Nuevos actos de injusticia y repudio social ha generado la conducta arbitraria de personal del Hospital 270 del Instituto Mexicano del Seguro Social, que atropellando todas las garantías de los derechohabientes ordena su incineración, aunque su muerte no haya tenido que ver con el temible COVID 19.
Esta semana nuevas manifestaciones de inconformidad se vieron en la institución médica donde personas que ingresaron por otras razones médicas que atendían desde hace tiempo, murieron ahí y sus cadáveres no fueron entregados a sus familiares sino únicamente las cenizas, siguiendo un imperfecto protocolo sin darles tiempo de que se les despidiera en alguna empresa funeraria.
IMPOTENCIA DE FAMILIARES
Fueron esta semana al menos tres casos, destacando el de una persona mayor de edad que acudió como lo hacía periódicamente, a recibir su tratamiento de hemodiálisis y repentinamente, mientras se hallaba en reposo en la misma institución sufrió un paro cardiaco-respiratorio siendo enviada de inmediato al crematorio para sorpresa y espanto de sus familiares que aguardaban en la sala de espera.
Los deudos de la víctima del exagerado procedimiento exigieron se les mostrara el dictamen pericial sobre las causas de la muerte que precede a la acta de defunción, pero por más que buscaron entrevistarse con las autoridades médico-administrativas, estos rehuyeron a enfrentarlos, saliendo a hurtadillas de sus cómodas oficinas.
EXPLICACIONES TONTAS
Los familiares de la persona de la tercera edad fallecida, indican que no estaba enferma de COVID 19, inclusive mostraron el resultado de una prueba rápida que le practicaron al momento de internarse en las instalaciones para recibir su tratamiento, pero su justo alegato no prosperó, ante el agrio personal médico que alegaba que esa persona tenía la contagiosa enfermedad y temían que contaminara a otros pacientes y a los mismos profesionistas de la salud.
Recientemente, a través del sacerdote Jesús García de la Iglesia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, una persona adulta denunció haber visto en la misma institución, como otra ancianita que llevaban en una bolsa negra rumbo a la morgue e intentaba salir desesperadamente de esa muerte asfixiante, inclusive tosía, pero el camillero satánico, se lo impidió sumiéndola en el mismo bolso y llevándola velozmente hacia el área del crematorio.
DE HEROES A VILLANOS
Esta y otras historias de terror se han multiplicado en los pasillos interiores y patios exteriores del Hospital Regional 270, sin que el personal directivo haya dado ningún informe público para saber en qué quedaron las investigaciones que prometieron realizar.
En el caso de este camillero solo fue descrito como el portador de un cubrebocas en el que llevaba impresa la sonrisa del maléfico villano de fantasía llamado “El Wason”.
Por eso se afirma que los anteriormente denominados héroes de la salud, son ahora repudiados y llamados los villanos de los derechohabientes.
