Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Un personaje icónico en las luchas sindicales y políticas de Reynosa, el profesor Enrique Hernández Alonso, rindió tributo a la madre tierra esta mañana, después de 83 años de vida de los cuales 62 los dedicó por completo a la enseñanza, siendo uno de los maestros con mayor número de años de la Secretaría de Educación Pública y que aún permanecía en activo en Tamaulipas.
El maestro pasó por las aulas desempeñándose como maestro frente a grupo en el nivel básico desde muy joven, pero fue en la impartición de su materia preferida, Matemáticas donde se hizo más notable con una trayectoria de 29 años en la Secundaria General No. 1 «General José de Escandón», donde llegó a ser director.
Actualmente se desempeñaba como Supervisor de Escuelas Secundarias Generales de la Zona 11, y aun mermado físicamente por las enfermedades nunca se dio por vencido y no dejaba de cumplir presencialmente con las actividades propias de su responsabilidad.
Hernández Alonso, tuvo un feliz matrimonio con doña Elia Almaguer (QEPD) quien hace un par de años falleció por consecuencias naturales, sobreviviéndole sus hijos Rosy, Nancy Edith, Antonio, Enrique y Rommel Hernández Almaguer.
Tuvo un destacable papel en las luchas intergremiales en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y por muchos años abiertamente participó en la CNTE (Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación) por cuya razón enfrentó algunas represalias de autoridades conservadoras, pese a lo que nunca se rindió y se mantuvo en su lucha desde la trinchera que le tocara estar.
Fue el mejor de los amigos del maestro Alejandro Castrejón Brito, quien lo integró a la actividad política partidista y el 5 de mayo de 1989 después de una breve militancia en el Partido Mexicano Socialista formó parte del Congreso Nacional constituyente del Partido de la Revolución Democrática, donde milito hasta hace unos años para después afiliarse a MORENA.
Precisamente el maestro Brito, fue uno de los pocos que le acompañó hasta los últimos minutos de su existencia en su lecho de dolor, cuando la ciencia médica se venció y dictaminó el deshaucio, optando Enrique por retirarse a casa, negándose a ser intubado.
Hombre de pocas palabras, pero de mucha acción, muchas veces resolvió sus diferencias a golpes, siempre actuando a la defensiva, (dicen que pegaba como patada de mula) y por ello se hizo respetar en cualquier terreno donde se encontrara siempre exaltando sus ideas, del lado de la razón y de las causas más justas.
Fue Presidente del Comité Municipal del PRD en los mejores momentos de este partido y tiempo después ocupó diversos cargos en el Comité Directivo Estatal de ese mismo instituto político del que fue consejero estatal y nacional, siempre al lado de su contemporáneo Alejandro Castrejón Brito que lamentó esa irreparable pérdida, recordando algunas de las cientos de vivencias que tuvo al lado de su amigo y de otros camaradas como Ignacio Escobar Figueroa (+), Roel López Olivares que aún vive, así como otro puñado de hombres que coincidieron en su paso por la existencia y pusieron su granito de arena hasta llegar a la actualidad con un gobierno federal de izquierda, como solo ellos pudieron imaginarlo.
Ante el féretro, en el parque funeral de la empresa Gayosso, desfilaron centenares de familiares, amigos y ex alumnos, todos vertieron elogiosos comentarios en honor a la valentía y cabalidad del maestro Hernández Alonso, incluido el líder sindical del magisterio Jorge Acuña, quien estuvo a dar el pésame a sus familiares el viernes.
La mañana de este sábado 20 de noviembre, el maestro originario de Hidalgo Tamaulipas, fue despedido entre flores, música regional, llanto, abrazos y emotivos comentarios, destacándose la presencia de innumerables personajes entre ellos la titular del CREDE, Georgina Aparicio; el contador Francisco Francisco Javier Tejeda Sánchez y los maestros Osiel Iram Segura López, Víctor Galeano Romero y su inseparable camarada de lucha el ex diputado local Alejandro Castrejón Brito.
¡¡Vaya con Dios y descanse en paz, estimable maestro!!.
