EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Ciudad de México.– El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó ayer que antes de que termine su sexenio buscará poner candados legales a cualquier intento de privatización futura de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
El mandatario estuvo de gira por el estado de México y Nayarit, donde junto con el director de la CFE, Manuel Bartlett, y otros funcionarios, llevó a cabo dos encuentros con trabajadores electricistas para convocarlos a participar en el proyecto Internet para Todos.
Mediante la instalación de 2 mil 800 antenas de la CFE y aprovechando la red de fibra óptica de la empresa pública, en combinación con otras 2 mil 500 antenas de Altán Redes –empresa de participación estatal mayoritaria–, se pretende interconectar todos los rincones de México y beneficiar a alrededor de 6.4 millones de habitantes en todo el país ubicados en poblaciones pequeñas.
Por la mañana, estuvo en Zinacantepec, estado de México, donde el gobernador priísta Alfredo del Mazo le agradeció su apoyo y dijo que se instalarán 91 antenas para llevar el servicio de Internet a 599 pequeñas comunidades, principalmente del sur de la entidad, con lo que se beneficiará a cerca de 300 mil habitantes de esa región colindante con Guerrero y Michoacán.
En Guerrero se colocarán 262 antenas para llevar Internet a poco más de mil pequeños poblados de la Costa Chica, la Costa Grande y la región montañosa del estado, mientras en Michoacán se instalarán 11 antenas para dar servicio a 755 poblaciones de la región de Tierra Caliente y de la sierra purépecha.
Por la tarde, en Bahía de Banderas, Nayarit, el gobernador morenista Miguel Ángel Navarro Quintero agradeció al mandatario federal porque Internet para Todos beneficiará a 400 comunidades marginadas del estado con la instalación de 64 antenas. En Jalisco se instalarán 75 antenas y en Colima nueve.
Empresa consolidada
En Nayarit, López Obrador afirmó: “a la CFE la vamos a dejar bien consolidada. Antes de que terminemos (el sexenio) voy a buscar el mecanismo legal más adecuado para que ya no se privatice nada de la Comisión Federal de Electricidad”, expuso un tanto afónico por una faringitis que lo aqueja desde hace días.
Se comprometió con los trabajadores de la CFE a que no habrá despidos en la empresa, “al contrario, se van a crear más empleos”, y aseguró que “el salario no se va a quedar por debajo de la inflación, se van a mantener las prestaciones y no se va a mutilar el contrato colectivo”.
Reiteró que dotar de servicio de Internet a todo el país es una revolución y que con este proyecto se está haciendo historia.
En el estado de México, el presidente agradeció el apoyo de los trabajadores electricistas y petroleros, maestros, personal médico e integrantes del sector salud, pues “sin él no avanzaríamos en la transformación de México”.
Bartlett afirmó que López Obrador es “el principal defensor de la CFE”. Añadió que Internet para Todos “es un programa que busca romper una relación de injusticia social. En las poblaciones en las que no llega Internet, tenemos una juventud que no tiene acceso a los grandes instrumentos de información, de conocimiento, de comunicación. Millones no se benefician de los atributos de la tecnología y la modernidad”.