Por René Mondragón
ESPLÉNDIDO TRABAJO
De verdad, gran trabajo de Javier Martínez, estudioso de investigador de MCCI (mexicanos@contralacorrupcion.mx) que nos cuenta en que se usará el Presupuesto de Egresos para 2023, el más grande de la historia.
Será la friolera de 8,3 millones de millones de pesos que, como señala Javier Martínez, la 4T se gastará 947 millones de pesos cada hora del año. Esto significa que la mentada “austeridad”, de eso, no tiene absolutamente nada Brutal, ¿no? Es que se trata del presupuesto más cuantioso de la historia de este país, de acuerdo a lo señalado por los expertos.
PRIMERAS MAROMAS
El presupuesto 2023 se divide en dos cajones: Gasto programable y Gasto No Programable.
Lo “no programable” –que es el 28% del total, y 21% mayor al 2022- es para pagar cosas no específicas, pero ineludibles como (…) como el pago de deuda y las participaciones federales (un tipo de transferencias a los estados y municipios.
Otra bronca: el costo financiero de la deuda pública que el presidente dijo que ya no le deberíamos a nadie ni pediríamos fiado, aumento un 30% en relación con el año pasado. Por eso, porque hay un montón qué pagar, pues no hay bienes ni servicios públicos. Igualito que en una casa.
La otra parte -72% del presupuesto- es el gasto programable que se destina a proveer bienes y servicios. En una parte que se llama “Ramos Administrativos” están los recursos destinados a programas sociales a cargo de la mal llamada Secretaría del Bienestar o al barril sin fondo conocido como el Chu-chu Maya.
POQUITO ANTES DE QUE SE ACABE
Tal y como lo anunció el presidente, solo alcanzaron poquito el Legislativo y el Judicial –por si había alguna duda de quién manda y decide- aunque también rasuraron a los órganos autónomos –para que se les quite la idea de ser contrapesos- por supuesto al INE, al INAI, a Transparencia, aunque representan una fracción minúscula, lo que ratifica la idea presidencial de acabar con ellos por la vía de la asfixia.
Es clarísimo. Solicitaron 145 mil millones y la mayoría de los morenos validaron una reducción en 6.4 mil millones.
¿Cómo le irá a hacer el INE, con solo 4.5 mil millones, para organizar todos los procesos e inclusive, darle dinero a los partidos, que nadie los tocó? Si todavía hay alguien que dude que el mandatario va sobre el árbitro electoral, estaría chorreando agua bautismal.
IDEOLOGIZACIÓN ELECTORERA
A pesar de las declaraciones en contra, lo que puede deducirse del manejo y destinos presupuestales es que, despiden un fuerte tufo a manejos ideologizados y tremendamente electoreros.
La Secretaría del Bienestar tendrá una parte del paraíso populista: 30% arriba de lo autorizado para el 2022. Pero la SEP, aunque le dieron un poco más que el año pasado, la verdad es que, la maestra que no puede contestar preguntas difíciles, seguirá con menos recurso que en el 2021 y 2018. O sea, la CNTE se va a enojar.
En opinión del escribano, el presupuesto de salud, no solo quedará lejísimos de Dinamarca, sino con muchas dificultades estará cercano a Timbuktú. Le dieron solo un 3% más que el año pasado. Y como los chilpayates no votan, le redujeron 17.8 mil millones de pesos al Programa de Vacunación.
LA DEL ESTRIBO
El Chu-chu Maya que nadie sabe hacia dónde va con incrementos brutales en sus costos, con serios problemas de transparencia y rendición de cuentas, con una opacidad sensacional y sin saber la utilidad real que tendrá, recibirá un aumento de 1,030% en términos reales, como si quisiera premiar la torpeza, la falta de planeación y la rentabilidad que la Auditoría Superior de la Federación ha señalado como Vox Clamantis in Deserto, porque la austeridad es solamente un mito en este país.
Cuando el hijo de mis entretelas leyó estos últimos párrafos, exclamó con estentóreo alarido: “Oye Pá… y te falto la central avionera del AIFA y la refinería que no refina”
Calla hijo de mi corazón que el espacio que me dieron ya se acabó.
