- Preside reunión con una pobre minoría
- Trajo grupo de choque para promoverse
Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Después de años de mantener en el abandono a los empleados de Reynosa afiliados al SUTSPET (Sindicato Único de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado de Tamaulipas), hoy muy campante reapareció por estos lares la eterna dirigente Blanca Guadalupe Valles Rodríguez, quien al menos en el Hospital Materno Infantil, encontró una férrea oposición a sus descabellados planes de reelegirse, luego de 29 años de vegetar al frente de la organización.
Bajo el slogan de “yo y el gobernador Américo Villarreal, nos entendemos”, la cínica mujer, que apenas hace unos meses portaba la camiseta azul y promocionaba entusiastamente dentro del sindicato, a César “El Truko” Verástegui, fallido candidato del PAN, hoy vino a hacer sus primeros tiros de calentamiento, aduciendo que de nuevo es el antídoto para curar los males del gremio.
GRITOS Y SOMBRERAZOS
Luego de sostener una reunión a puerta cerrada con cuatro o cinco de sus achichincles en la que, por supuesto, fue excluido el dirigente local del sindicato del SUTSPET, doctor Fernando Cavazos Medina, la maltrecha dama se reunió en el auditorio de la institución médica con apenas 47 trabajadores de los más de 700 que trabajan ahí y están inscritos en el sindicato.
Antes de ello el doctor Cavazos Medina, Irrumpió violentamente en la oficina donde Blanca se había reunido con incondicionales para marcarles la pauta en cuanto a cómo se iba a realizar la reunión.
EN LO OSCURITO
Allí, el dirigente local del SUTSPET, reclamó junto con otros empleados, la violación a la autonomía sindical al convocar a reuniones pasando sobre su representación, es decir sin tomarlo en cuenta.
Cuando un grupo de apenas tres reporteros intentaron entrar a esa oficina con intenciones de platicar con la dirigente ésta ordeno a un sujeto gorilezco, echarlos fuera y cerrar la puerta. El tipo en cuestión hoy sabemos que se llama Juan Antonio Chávez, y es Secretario del Interior del directivo estatal, quien también minutos después intentó sofocar la rebelión enfrentando en los pasillos del hospital al doctor Cavazos Medina, al que intentaba callar y reducir en sus protestas, pero sin conseguirlo.
NO SE CANSA DE MAMAR
Ya adentro del auditorio, enardecidos trabajadores le recriminaron a la Valles Rodríguez, que para qué quiere seguir vegetando en el SUTSPET, si en 29 años no ha hecho nada más que enriquecerse y enriquecer a todos sus familiares y secuaces, muchos de los cuales ya se han jubilado sin trabajar.
Trabajadores como el doctor Feria, Lucila Macías y muchos otros le gritaron que ella está impedida por la Reforma a la Ley Federal del Trabajo para reelegirse, pero aquella adujo una inexistente jurisprudencia nacional, la cual iría en contra de los principios que enarboló el presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, cuando promovió ese decreto.
NI LA BURLA PERDONA
Así a fuego cruzado se realizó la infumable reunión en la que Valles Rodríguez, se decía “víctima de trabajadores malagradecidos por quienes ha dedicado su vida”, hablando repetidamente de recientes beneficios que el gobernador del estado, Américo Villarreal Anaya, entregó a los trabajadores de los poderes del estado, “medallas”, que, por supuesto pretende colgarse la odiosa, que se burlaba en su cara, de quienes le hacían señalamientos.
Con más pena que gloria, así se regresó a casa Blanca Valles, no sin antes amenazar con volver, trayendo consigo las bajas de los alborotadores que osaron enfrentarla y decirle sus verdades, llamándola una mujer sin escrúpulos, que no tiene llenadera y que pretende agarrarse de la institucionalidad para seguir haciéndose vieja, pegada a la chichi gubernamental.