EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Ciudad de México.- La temporada 2023 de la MLB cumple este jueves tres semanas y en su inicio Tampa Bay ha sorprendido con una marca de 16 ganados y solo tres perdidos, siendo la mejor novena hasta el momento en las Ligas Mayores y con el cubano-mexicano Randy Arozarena como su principal motor.
Randy Arozarena, el pelotero cubano naturalizado mexicano que brilló en el pasado Clásico Mundial de Beisbol, ha sido pieza clave en el arranque del cuadro de Florida, que el año pasado quedó eliminado en las series de comodines.
Hasta hoy, Randy suma 24 hits en 72 turnos al bate, con un porcentaje de bateo de .333. Ha pegado tres dobletes, cuatro cuadrangulares y ha logrado impulsar 18 carreras, que representan ya el 20 por ciento de las 89 que generó en el 2022, su mejor número desde que debutó en la MLB.
La mejor campaña de Randy en las Mayores fue la pasada, tuvo 586 turnos al bat, conectó 154 imparables, 20 cuadrangulares e impulsó 89 carreras, cerrando con promedio de bateo de .286.
Arozarena arribó a Tampa Bay y a la MLB en el 2019 y desde su llegada fue clave para que el equipo de Florida, donde un año después, en el 2020, fue nombrado MVP de la Liga Americana y además fue pieza importante para llegar a la Serie Mundial, que a la postre ganarían Los Angeles Dodgers.
El furor de ser mexicano
Sin embargo, fue hasta este 2023 cuando su nombre comenzó a posicionarse entre la afición mexicana, en gran parte por su naturalización y el gran desempeño que tuvo con la Selección Mexicana, siendo uno de los consentidos de la novena.
La estrella de Tampa nació un 28 de febrero de 1995 en Pinar del Río, Cuba. Luego de pasar por algunos equipos mexicanos comenzó su naturalización como agradecimiento por el impulso que tuvo para llegar a las Grandes Ligas.
Su llegada a la novena mexicana se dio gracias a la promesa que le hizo al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador. El propio primer mandatario, aficionado declarado al rey de los deportes, recordó que tras la victoria ante Estados Unidos en Phoenix, Arizona, donde se completó la actividad del Grupo C del Clásico Mundial, cómo fue que se dio el acuerdo con Randy y que éste cumplió su palabra de representar a México.
Randy probó suerte en el futbol
Antes de convertirse en beisbolista, Randy Arozarena probó suerte en el futbol, de acuerdo a unas declaraciones que hizo su hermano Rayko, quien fue el primer portero de origen cubano en jugar un partido oficial en el balompié mexicano, en la Liga de Expansión.
“Randy comenzó como futbolista, yo comencé como beisbolista, pero Randy cambió al beisbol rápido cuando era chico; yo cambié al beisbol hasta los 13 años. Randy jugaba como delantero y yo jugaba de segunda base”.
