EN CONCRETO/ Por: Blanca Leticia Guerra

Opinión

LISTOS O NO, ARRANCÓ EL 2024

Y sálvese quien pueda, porque el 2024 es un año fundamental para la política de
nuestro país al terminar el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, quien
indiscutiblemente ha marcado un parteaguas en la historia de México y aunque todo
parece indicar que será la Dra. Sheimbaun quien se quede en la silla presidencial y con
esto exista la posibilidad de continuar con la cuarta transformación instituida por AMLO,
la moneda todavía está en el aire…

En Tamaulipas sin embargo, la ola de la 4T alcanzó y pegó recio, pues somos un
gobierno morenista, además bien visto por el presidente de la república según los
últimos comentarios que ha hecho en la mañanera; por otra parte están las
administraciones municipales, en las que se cuentan Ciudad Victoria, Reynosa,
Matamoros, Nuevo Laredo y otras 8 ciudades más. Habrá que esperar los resultados
de las elecciones de este año, para saber si fue solo una ola, los chapulines, o si
efectivamente Tamaulipas cambió de color.

CUADRILLAS DE TRABAJO PARA DARLE MANTENIMIENTO A REYNOSA

En otros temas, en Reynosa, el gobierno encabezado por Carlos Peña Ortiz, arrancó
el año con un despliegue de cuadrillas de trabajado de limpieza, mantenimiento,
bacheo, alumbrado público, reposición de señalamientos en vialidades y reparación-
sustitución de semáforos.

Los trabajos de limpieza se hicieron en diferentes vialidades importantes, como la
carretera Ribereña y el Blvd. Hidalgo, entre otros; las reparaciones, mantenimiento y
sustitución de lacaras para el mejor alumbrado público, en las colonias Hidalgo, El

Olmo y Vista Hermosa; en cuestiones de la reposición de semáforos fue por el Blvd del
Maestro y otras vialidades y el bacheo lo vimos por Las Cumbres y Las Fuentes.

En este mismo tenor, de darle mantenimiento a la ciudad, les cuento que ayer que
inició el año, buscando una buena vista y un poco de espacio para reflexionar, me fui al
Parque Cultural Reynosa (abro paréntesis para decir que hasta hace 2 semanas vivía
en la Ciudad de México y volvía a Reynosa eventualmente a visitar a mi familia así que
mucho de lo que aquí ocurre yo lo estoy apenas descubriendo).

Lo primero que me sorprendió es que había muchísima gente, familias completas en
bicicletas o patines divirtiéndose sanamente y es que no me había tocado, las veces
que había asistido en los 7 años que viví fuera, era poco la gente que había,
considerando el tamaño del recinto; lo segundo fue lo descuidado que está el lugar…
Siendo realistas, Reynosa tiene pocos espacios de esparcimiento y si bien las
instalaciones están en buenas condiciones (al exterior, porque los teatros cada vez van
de mal en peor, eso sí lo sé de propia experiencia), hace falta un trabajo de
saneamiento y eliminación de plagas bastante profundo, tanto en la laguna como en
sus alrededores, porque hay tantísimos mosquitos que uno no puede detenerse a
apreciar la vista, que es bastante linda, aunque se le podría sacar mucho más
provecho.

Otra de las situaciones es que en una buen parte de la ciclopista no hay alumbrado
público y eso resulta, dadas las condiciones de seguridad del municipio, en un riesgo
latente.

Pienso sobre todo en esto que mencionaba, hay pocos lugares para pasar una tarde
con la familia y el PCR ya está aquí, solo hay que darle los cuidados que necesita. Y
yéndonos un poco más allá de lo que el placer de la vista nos regala y el buen rato que
ahí se podría pasar, en temas de salud, también es importante mencionar la cantidad
de infecciones o enfermedades que acarrean los piquetes de mosquitos… todo un
tema para trabajar tal vez en enlace el gobierno municipal con el estatal.

¿O usted qué piensa?

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