Por Oscar Díaz Salazar
En los cálculos de los panistas, que conocen del asunto, que tienen responsabilidades en la campaña y que tienen acceso a encuestas e información relevante, esperan ganar más posiciones que las que actualmente tienen en Tamaulipas.
Los azules esperan repetir en la mayoría de los municipios chicos en los que hoy gobiernan. Ampliar su grupo parlamentario en el Congreso del Estado, con más diputados de mayoría y con más legisladores de la lista plurinominal. Incrementar su presencia en los Ayuntamientos donde no gobiernan y aumentar el número de integrantes del grupo de diputados panistas y priistas de Tamaulipas en la Cámara federal.
Creo que lo más interesante de ese pronóstico es la relación, caso por caso, de los municipios en los que tienen confianza en obtener la victoria en las elecciones que tendremos a mediados del año en curso.
De acuerdo a los números del Coordinador de la campaña de Xochitl Galvez en Tamaulipas, el PAN (la coalición PAN/PRI) va a ganar en Tampico, Mante, Matamoros, Rio Bravo, Valle Hermoso, Altamira y Victoria.
En el análisis y pronóstico del diputado Gerardo Peña, hay matices, cuando señala: Tampico, Valle Hermoso y Mante son los más firmes, porque ahí gobierna el PAN y porque gobiernan bien.
La condición necesaria y suficiente para ganar Matamoros, desde la perspectiva de Gerardo Peña, – y de los involucrados en la campaña del PRIAN – ya se cumplió, y es que el candidato fuera Beto Granados, quien cuenta con la querencia del señor de Victoria, pero también cuenta con la malquerencia de los señores de Matamoros, incluyendo el señor de cabello ensortijado que hasta hace poco despachaba como presidente municipal.
La expectativa de triunfo panista en la capital del Estado, se fundamenta en que traen un buen candidato, – así lo cree GP – y las posibilidades crecen de manera exponencial si los de enfrente repiten la ficha, es decir si morena postula nuevamente al Rey de los negativos, Eduardo Gattás.
Para el caso de Altamira los argumentos para vaticinar el triunfo del albiazul y el tricolor es el carisma de su candidato, el acuerdo con los dueños del pueblo (caciques políticos) y un arranque con la diferencia minúscula que los separa de morena y su candidato.
En cuanto a la capital del sorgo (Rio Bravo), además de los números iniciales, mencionó la división entre las figuras más encumbradas de morena, la fortaleza de su candidato, las divisiones en el equipo que gobierna y los episodios de violencia extrema que han sido recurrentes.
En el caso de Reynosa, pese a tener un mal candidato (yo lo dije y con su silencio, concedió) podrían dar la sorpresa si deciden salir con un candidato diferente al actual presidente Carlos Peña.
