Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.—A menos de 24 horas de que el presidente municipal Carlos Peña, anunció que se presentaría con bombo y platillo a la colonia Modulo 2000, para entregar a una de las familias más afectadas, un vale para materiales de construcción por un orden de 150 mil pesos, los “beneficiarios”, acordaron rechazar el apoyo al considerar una burla sangrienta el espectáculo que pretendían montar en torno a su tragedia.
La señora Martha Imelda Pérez García, propietaria de la casa que sufrió mayor afectación con la explosión de pirotecnia del pasado 2 de septiembre, declaró a los medios informativos no oficialistas, que no se prestará a la pantomima del alcalde Carlos Peña Ortiz, que a la fecha no ha dimensionado los incalculables daños que sufrieron los domicilios más cercanos a la zona del desastre que dejó a dos personas fallecidas, pretendiendo pararse el cuello como el gran benefactor, para lo que saco 5 millones de pesos de las arcas municipales para destinarlos a “ayudas”.
DESATENDIERON DENUNCIA
El domicilio de la calle Nuevo Santander 417, que es el de la familia Pérez García, se ubica justo a un costado de la casa totalmente derruida, misma que almacenaba grandes entidades de pólvora en cohetones y otras diversas presentaciones, a la que nunca acudieron a revisar a pesar de las denuncias que formularon todos los vecinos ante diversas autoridades.
La parte ofendida externó, que fue el “licenciado Olivares” la tarde del miércoles quien le llamo telefónicamente para “darle instrucciones” para dramatizar un acto público en los alrededores de lo que quedó de su derruido hogar, donde el presidente municipal llegaría, vale en mano, para auto boletinarse y lanzarse confeti, demostrando a todos sus vecinos que si los está apoyando en torno a la desventura de perder su casa, lo que consideraron que es de pésimo gusto, algo que ilustra los hígados negros del munícipe narcisista.
NO HAN ENTREGADO PERITAJE
Lamentó la señora Martha Imelda, que a la fecha a pesar de que ella batalló para cumplir una multitud de requisitos que le exigieron en Desarrollo Social de donde surgiría el mentado apoyo, hasta el momento la Coordinación de Protección Civil no les ha entregado el dictamen de los daños sufridos en su casa de dos plantas que quedó potencialmente destruida y está pendiendo peligrosamente, sostenida solo por unos polines que instalaron los mismos bomberos municipales y rescatistas.
“Agradezco la generosa muestra de apoyo del municipio, pero no puedo aceptar, porque ese dinero no me servirá para reparar mi casa, no se, bajo qué criterios se basaron para hacer esta asignación que evidentemente solo me serviría para levantar una pared y donde voy a vivir después”
SE SALVARON DE MILAGRO
La familia afectada actualmente radica en casa de otro familiar en la misma colonia, agradeciendo a Dios el milagro de no haber muerto aplastados junto con su pequeña recién nacida que afortunadamente acababan de salir, cuando las paredes de su hogar fueron lanzadas con la explosión contigua, que dañó más de 30 hogares y 50 vehículos, según observaciones hechas en su momento por el mismo jefe de PC, Ernesto Gómez De la Peña, incluidas la mayor parte de las aulas de la secundaria No. 6, donde se quebraron todos los vidrios por la onda expansiva que se extendió a trescientos metros a la redonda.
El colmo del intento de lucro que se pretende realizar con las personas a las que se les ha ofrecido un vale, es ofrecerles también que la presidencia municipal les puede “recomendar” un proveedor de materiales de construcción, como le hizo de forma insistente y con insensible tacto del tal “licenciado Olivares”.