POR FERNANDO ACUÑA PIÑEIRO
Paralela a la lucha libre de la feria Tamaulipas, y muy cerquita del recinto donde año con año corren los caballitos y se revientan globos, se está gestando otra función estelar de pronóstico reservado. Un luchador conocido como el “Vaca blue” está ya avalado por la autoridad del pancracio legislativo y su contrincante será un esteta del ring conocido como “El Sonorense”.
El respetable se ha acomodado ya en sus asientos. Todos quieren lugares de primera fila. A tres caídas con límite de tiempo parlamentario, y en un duelo histórico de máscara contra máscara.
Vaca blue compite por el bando de los rudos. Y el Sonorense representa a los técnicos. Se espera que el rudo texano no recurra a las clásicas fichas y a las “mordidas”, entiéndase sobornos a diestra y siniestra. También tendrá encima la lupa de la LXVI para evitar que contrate chicas de buen ver y mejor tocar.
El Sonorense ya ha estado en el bando rudo y conoce muy bien las triquiñuelas de su adversario. Mientras eso ocurre en el palacio con forma de huevo de dinosaurio, la feria estatal Tamaulipas ya ha dado inicio para delicia de chicos y grandes.
Ahí le va esta cartelera de los grupos musicales que estarán amenizando en el teatro del pueblo. Sebastian Yatra, Invasores de Nuevo León, Kumbia Kings, La Leyenda, Juanes, Bely y Beto, Alejandra Guzman, Enanitos Verdes, Angeles Azules, y Pesado.
La entrada a la Feria Tamaulipas se dice que cuesta 40 pesitos. Todo un torbellino de diversión. Pero el ingreso al otro espectáculo, el de la clase política, ubicado justo a la otra orilla del boulevard, ahí sí se necesitará credencial con fotografía.
Cual de los dos prefiere usted? Dicen que en el Congreso también puede haber corridos…o detenidos. Y acá en el Congreso también tendremos palenque, y habrá no solo gallos , sino también palomas.
Finalmente el pueblo llano lo que quiere es pasar una noche en paz con la familia, lejos de la real politik y sus estrategias que culminan en puro show mediático. Si usted es de los que prefiere llevarla tranquila, y comerse un algodón de azúcar para darle vuelo ala diabetes, y un hotdog con pan michoacano, (pa, la hipertensión arterial) vengase a la feria estatal de Tamaulipas, y podrá cerciorarse de los kilos que le echan los alcaldes morenos que son los machuchones en los stands. Mención aparte merecen las morrallas azules que ya se alinearon con el gobernador, y le dieron la espalda al Truco. Cuestión de ver su comportamiento más adelante, porque ya les leyeron la cartilla. Y cualquier intento de manotear la lana del pueblo, les saldrá caro, en materia de auditorías y con opción a sacarse un auto..de formal prisión.
Como bien podrá usted notar, en la feria del pueblo también hay política, y en la política del Congreso también hay mucha feria.
—-EL CRECIMIENTO POLÍTICO DE NOROÑA–
Recientemente vi la foto donde se encuentran y saludan protocolariamente dos personalidades explosivas: el senador Gerardo Fernández Noroña y la ministra Presidenta de la Suprema Corte de Justicia Norma Piña Hernández.
Fue un encuentro institucional, pero con un lenguaje corporal muy genuino. Ambos adoptan una sonrisa como la del gato Cheshire, uno de los personajes más irónicos y mordaces del cuento “Alicia en el País de las Maravillas”.
Desde que acudió al encuentro, la señora Norma Piña ya sabía que estaba en la olla morena. Mientras que Noroña y compañía cumplieron con su rol de ser los chefs de ese cocimiento a fuego lento, que está todavía en la estufa.
En las últimas semanas, este personaje de oratoria contundente y activismo sinigual, se ha convertido en el operador de la Presidenta Sheinbaum, para derribar la última fortaleza del bastión prianista, disfrazado de Poder Judicial.
Antes de eso, hubo de todo. Desde advertencias de juicio político para la matriarca de la SCJN, denuncias de golpe de Estado. (Claudia Sheinbaum dijo que más bien fue un golpe aguado que no altera para nada el camino a dicha enmienda), hasta esa memorable reunión con los miembros del Congreso de la Unión, que fue interpretada periodísticamente como la rendición la polémica ministra.
En fin, hoy por hoy, el activista más encumbrado y mejor posicionado de la izquierda morenista y petista, se llama José Gerardo Rodolfo Fernández Noroña.
Un sociólogo de 64 años, egresado de la Universidad Autónoma Metropolitana. Se desempeña actualmente como el Presidente de la mesa directiva del senado de la república, y anda recorriendo el país, presidiendo asambleas informativas, donde aporta su esclarecimiento al tema de la reforma judicial.
Este viernes 11 de octubre el senador Noroña estará en el sur de Tamaulipas, específicamente en las ciudades de Tampico, Madero Y Altamira. En este último municipio dará un mensaje relacionado con la disolución de la actual Suprema Corte de Justicia del país. Para ceder el paso a un Poder Judicial electo mediante el voto ciudadano.
Hay mucho que decir sobre este personaje sui generis de la cuarta transformación en México. Su activismo político y su militancia siempre en el ojo de la tempestad, darían para escribir un grueso volumen de congruencia y definiciones ideológicas, en la izquierda.
Un rasgo distintivo de Fernández Noroña que lo convierte enfant terrible de la polémica y la argumentación, hacia dentro y fuera de MORENA, es su credo iconoclasta, desafiante del poder.
Durante los cuatro sexenios y su cuarto de siglo que antecedieron a la Presidencia de Andrés Manuel López Obrador, uno de los que tuvo arrestos para enfrentarse a Ernesto Zedillo, a Vicente Fox, a Felipe Calderón y a Enrique Peña Nieto fue Noroña.
En 1996 el Presidente Zedillo lo encarceló durante algunos días, luego de que Noroña lo encaró con un valiente acto de protesta en la ciudad de Cancun. Como activista político de la izquierda, GFN fue una constante pesadilla para los elementos del estado Mayor presidencial, especialmente en los tiempos de Felipe Calderón. En ese sexenio, Noroña denunció amenazas de muerte. Y en el último informe de Enrique Peña Nieto, de plano no lo dejaron ingresar al recinto donde se realizaba este evento.
Durante el reciente proceso interno de MORENA por la candidatura presidencial, Noroña ha sido uno de los políticos que más se fortaleció en materia de popularidad y apoyo ciudadano. Con todo y su rebeldía natural, siempre le fue leal a AMLO y es uno de los más estimados por la actual Presidenta de la república Claudia Sheinbaum Pardo.
Lo anterior no le impidió protestar públicamente, por lo que calificó como una injusticia, después de que no le asignaron un puesto de primer nivel en el gabinete federal, que dio el primero de octubre.
Hoy Noroña recorre el país, abanderando una causa central y estratégica, considerada como de primer orden para el gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
Difundir y esclarecer los términos en que se está instrumentando la reforma al poder judicial federal.
Vamos a ver, como evoluciona la carrera política de Gerardo y el papel que seguirá jugando en el sexenio que inicia.
