POR MARIO. A DIAZ PALACIOS ¿…y el Rooocha?
-Guerra entre “Mayiza” y “Chapiza” hace tambalear al gobernador de Sinaloa
-La violencia extrema ha impactado la economía, la política y la sociedad civil
-Despliegue militar y recorrido de Omar García Harfuch no han servido de nada
H. Matamoros, Tamaulipas.-Por más que pretenda reducir a su mínima expresión la
gravedad de la situación y alardear del cuerpeo del gobierno federal, la verdad es que la
situación del gobernador de Sinaloa, RUBÉN ROCHA MOYA, es bastante complicada.
Y, lo más lamentable, el mandatario estatal sinaloense enfrenta la crisis por partida doble.
Por un lado, el marcado avance de la erosión de su gobierno como consecuencia de la
violencia extrema y, por otro lado, el riesgo personal que representa la responsabilidad
que le adjudica uno de los poderosos grupos en pugna en esa entidad del Pacífico
mexicano.
El gobierno de ROCHA MOYA comienza a resentir los efectos de la inestabilidad política y
la desconfianza de las instituciones oficiales, luego del “bombardeo” de panfletos
lanzados desde avionetas en el municipio de Culiacán en donde el grupo delictivo “La
Mayiza” lo acusa de apoyar a “Los Chapitos” y permitir el cobro de piso y la extorsión.
La rivalidad entre los hijos de los capos del narcotráfico ISMAEL ZAMBADA y JOAQUÍN
GUZMÁN a raíz del secuestro del primero para entregarlo a las autoridades
norteamericanas, ha desquiciado la actividad económica, política y seguridad pública
derivado de los combates entre ambos grupos delictivos en pugna.
El objetivo de “La Mayiza” es aniquilar a sus ahora archienemigos de “La Chapiza” que
controlan la capital de Sinaloa y sus alrededores. Decenas de muertos, desaparecidos,
bloqueos y robo de vehículos es el saldo de la confrontación que el gobernador RUBÉN
ROCHA pretende minimizar.
Actualmente, la población civil que habita en las áreas urbana y rural de la ciudad de
Culiacán y sus alrededores enfrenta el natural temor e incertidumbre que provoca las
constantes balaceras que, en ocasiones, los deja en medio del fuego cruzado.
Asimismo, aunque el jefe del Ejecutivo en Sinaloa pretenda “tapar el sol con un dedo”, la
triste realidad que no tan solo la actividad política, social y económica se ha visto afectada
por la ola de violencia; la agenda cultural estatal también ha colapsado.
Grave y lamentable es que el despliegue de 2 mil 500 efectivos militares en la zona de
combate no ha logrado tan siquiera inhibir las acciones beligerantes de los dos poderosos
grupos delictivos que pretenden aniquilarse.
A pesar del uso de armamento más poderoso, vehículos de combate artillados y personal
militar de elite, tanto “Los Chapitos” como “La Mayiza” han logrado evadir los patrullajes,
pero enfrentan “en topones” a las fuerzas federales.
El problema para el gobierno de la Cuarta Transformación es que, como consecuencia de
los enfrentamientos en Culiacán y sus alrededores, los combates se han extendido a
territorios de los estados de Sonora, Durango, Chihuahua, Nayarit, Coahuila y Baja
California.
Recientemente, el gobernador RUBÉN ROCHA MOYA fue arropado por los legisladores
morenistas a quienes solicitó un voto de confianza ante el grave problema a de
gobernabilidad que enfrenta derivado del secuestro de ISMAEL ZAMBADA y el asesinato
del diputado federal y ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), HÉCTOR
CUÉ.
El sesgo que ha tomado el homicidio del legislador panista plurinominal luego de las
indagatorias de la Fiscalía General de la República (FGR), es otro “prietito en el arroz” que
mantiene sumamente preocupado al mandatario estatal sinaloense.
El hecho que la FGR haya demostrado que el diputado federal panista fue asesinado en el
mismo lugar que fue secuestrado ISMAEL ZAMBADA, tal y como éste lo afirmó por medio
de una misiva, prácticamente coloca a ROCHA MOYA en el ojo del huracán jurídico.
Por otra parte, la “gran hazaña” del secretario federal de Seguridad Pública, OMAR
GARCÍA HARFUCH, de caminar “tranquilamente” por las calles de Culiacán acompañado
por los altos mandos militares, tampoco arrojó el resultado que se esperaba.
Obviamente, el recorrido se realizó por una zona céntrica totalmente blindada por
elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, acción que algunos críticos calificaron
como “una payasada”.
DESDE EL BALCÓN:
I.-En el caso del asesinato del ex rector de la UAS y diputado federal panista, HÉCTOR CUÉ,
la investigación de la FGR ha colocado en grave predicamento jurídico a la ex fiscal general
de Sinaloa, por el pésimo montaje para desviar la realidad del homicidio.
Ni hablar.
Y hasta la próxima.
mariodiaz27@prodigy.net.mx