MELITON GUEVARA CASTILLO.
Yo no se ustedes, amables lectores, pero yo si estoy preocupado por la política
proteccionista de Trump. No soy experto en economía, pero los especialistas indican que
una guerra de aranceles siempre tiene efectos negativos, lo mas común una recesión. Y
siempre los mas afectados son los que menos tienen y sus características mas evidentes son:
una disminución de la producción, aumenta el desempleo y hay, en consecuencia, una caida
del Producto Interno Bruto (PIB).
Recuerdo que una ocasión Ernesto Zedillo, como presidente, tomo una decisión económica;
genero un plan de emergencia económica, medidas que dijo era para evitar la inflación y
devaluación del peso. A la postre, recuerden, el peso se devaluó porque, nos dijeron, Carlos
Salinas dejo la economía detenida con alfileres, nos vendió espejitos de crecimiento y
desarrollo. Una economía que deja de crecer, siempre es un presagio para el pueblo porque
es quien sufre las consecuencias inmediatas.
TE DOY Y ME DAS.
La historia económica nos enseña que, en un principio, el ser humano era autosuficiente:
cazaba, sembraba, pues lo necesario para subsistir; al ir creciendo, fue necesario el
intercambio de cosas o mercancías, pues unos tenían unas cosas y no eran suficientes, se
necesitan otras, y para compensar las intercambiaban mediante el trueque. Hasta que
apareció la moneda y el comercio se institucionalizo. El sistema de producción mejoro y
empezaron las diferencias.
Por eso, se habla de balanza comercial: por ejemplo, entre México y Estados Unidos hay un
intercambio comercial; incluso, por años, la balanza ha sido favorable a México: le
vendemos mas a los Estados Unidos de lo que compramos. Esa diferencia, es la que Trump
quiere nivelar: afirma que, bajo este esquema, todos los países se han beneficiado y Estados
Unidos pierde, de ahí su propuesta de imponer aranceles a medio mundo: si nos cobran
impuestos, dice, vamos a cobrarles también, incluida la Unión Europea.
NO ES GUERRA COMERCIAL.
En mas de una ocasión el gabinete de Trump a dicho que el tema de los aranceles (sobre
todo con México) no es una guerra comercial. Efectivamente, mas de una ocasión, el
presidente gringo ha usado el tema de las drogas y de ahí sus exigencias de cubrir la
frontera con la guardia nacional, los múltiples operativos para detener a miembros del
crimen organizado y, presumir su detención en la mañanera del pueblo. La cuestión es que
Trump, un día si, y otro también, insiste en el tema… y afirma que los aranceles van.
En este proceso, digamos de interacción, dialogo y cooperación, se puede considerar el
regalo que la delegación mexicana encabezada por el canciller Juan Ramón de la Fuente le
hizo entrega ayer de un excelente regalo: les mandaron a 29 delincuentes o criminales que
estaban presos en el país. La reunión encabezada por el canciller, incluyó al Fiscal
Alejandro Gertz Manero, así como a Omar García Harfuch, de Seguridad Nacional fue
ayer, aun no sabemos el resultado, pero eso sí, se difundió ampliamente la entrega de los
delincuentes, haciendo énfasis que se cumplieron con todos los protocolos y se respetaron
sus derechos humanos.
INCERTIDUMBRE.
La presidenta Claudia Sheinbaum hace notar que no le tiene miedo a Trump: que el pueblo
la apoya y que, en caso de que lesionen o lastimen nuestra soberanía, nuestro pueblo la van
a defender. Entiéndase, es un discurso para alentar el ánimo; sin embargo, los hechos ahí
están: a la amenaza de Trump con imponer aranceles, México refuerza la frontera norte
para evitar trafico de personas como de drogas; se ha desarrollado una estrategia para
detener a delincuentes y, ahora, como un regalo oportuno… va el gabinete de seguridad a
entrevistarse con Marcos Rubio y México les entrega a 29 delincuentes que estaban presos.
El próximo martes será un día crucial: ese día, ha dicho Trump, los impuestos van para
México y Canadá. Todo hace indicar que el dialogo, las múltiples acciones realizadas en
contra de la delincuencia organizada, no han sido suficientes… la entrega de delincuentes,
quizá fue uno de los planes de la presidenta, pero nos dijo que tenía plan a, b, c, d y hasta e.
Así que, esperemos pues, pero la incertidumbre la vive el peso mexicano que ante las
declaraciones de Trump se deprecia, es decir, pierde valor.