Ciudad de México.- Con 17 goles, el mexicano Ramón Arroyo Sánchez ostenta la marca de más anotaciones en un partido, al menos en el futbol mexicano, la cual ocurrió el 19 de diciembre de 1995 cuando la Jaiba Brava del Tampico Madero enfrentó a Truenos de Ciudad Acuña en la Tercera División y lo derrotó 29 -0 en el Estadio Tamaulipas.
El exfutbolista profesional no pudo debutar en la Primera División, aunque sí estuvo con los Gallos después de aquel récord que ningún jugador del nivel de Lionel Messi o Cristiano Ronaldo ha logrado.
“Sabíamos del rival que venía mal, nunca imaginé que esto pasaría, solo en sueños, pero el profesor Franco Zúñiga siempre nos entrenó en media cancha puros tiros a gol por lo mismo; él decretó que íbamos a meter 30 goles, nunca le creímos, pero mira pasó y gracias a Dios fueron 29 goles de los cuales yo metí 17”, expresó en entrevista para Milenio
La primera anotación de los 17 de aquella tarde llegó cuando el duelo ya estaba 4-0 a favor de la Jaiba Brava.
“Recuerdo que Acuña ya no quería salir a jugar el segundo tiempo, ya les habíamos metido 14, gracias a Dios los chavos salieron otra vez al campo y pues ahí vino el resto de la historia”, contó Arroyo Sánchez.
Después de aquella hazaña, el delantero fue contratado por Querétaro en la Primera División pero no pudo mostrar la misma contundencia así que se regresó a Correcaminos de la Primera A, hoy desaparecida.
“Ya se cumplieron 25 años de ese histórico partido. Fueron momentos inolvidables; esos momentos jamás se borran de la mente, son recuerdos melancólicos ahorita porque ya son 25 años; es algo muy bonito porque todo mundo te recuerda y los amigos te dicen ‘es un honor convivir contigo’. Es un récord que todavía está impuesto a nivel nacional y seguiremos toda la vida recordando esto”, dijo.
El exfutbolista se tuvo que retirar para cuidar de su padre que estaba delicado de salud, lo cual es algo que no se arrepiente porque finalmente apoyó a su familia. Aún así, se quedó con la “espinita” clavada de cumplir el sueño en la Primera División.
De acuerdo con la Federación Internacional de Historia y Estadística de Futbol, la mayor cantidad de goles convertidos por un jugador en un partido de Primera División pertenece a Stephan Stannis, del Racing Club de Lens, tras anotar 16 goles al Aubury Asturies, en 1942 por la Copa de Francia de 1941-42.