Nueva York.- El gobierno del presidente estadunidense Donald Trump desistió de retirar los visados a estudiantes universitarios extranjeros que deban seguir sus cursos en línea a raíz de la pandemia, informó ayer una juez federal de Boston.
Más tarde, Trump declaró: Queremos ley y orden y un sistema migratorio basado en méritos
, en una conferencia de prensa pronunciada en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca. Agregó que el muro fronterizo, que ya tiene 416 kilómetros, se terminará de construir a principios del próximo año.
Trump aseguró que la oposición demócrata quiere derribar el muro
y atribuyó el éxito
de la barrera también a los 27 mil soldados mexicanos que resguardan a frontera gracias a mi amigo
, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador. Somos amigos pese a que nuestras visiones y temperamentos son opuestos
, afirmó sin mencionar a su homólogo de nombre, al recordar el encuentro que tuvieron la semana pasada.
La decisión de revocar la eliminación de visados a estudiantes fue cuestionada en la justicia por 18 estados más el Distrito de Columbia, la Universidad Harvard y el MIT, con el apoyo de otras universidades y sindicatos de profesores.
La juez no dio más detalles sobre las razones de esta marcha atrás del gobierno, pero el anuncio tomó a todos por sorpresa.
Miles de estudiantes extranjeros corrían el riesgo de ser deportados de Estados Unidos, epicentro de la pandemia mundial de coronavirus, porque sus universidades sólo ofrecerán cursos en línea a partir del próximo semestre.
Harvard y el MIT fueron los primeros en hacer frente a la decisión de la policía migratoria el miércoles pasado, cuando pidieron a la justicia bloquear esta orden arbitraria y caprichosa
.
Parece que fue diseñada a propósito para presionar a las universidades a fin de que abran sus campus para clases presenciales este otoño, haciendo caso omiso de las preocupaciones sobre la salud y la seguridad de los estudiantes, profesores y otros
, dijo el rector de Harvard, Lawrence Bacow.
Trump, quien ha hecho de la lucha contra la inmigración el buque insignia de su mandato y apuesta a la reactivación de la economía para ser relecto en noviembre, llama incansablemente a la reapertura de escuelas y universidades.
Estados Unidos tiene cerca de un millón de estudiantes extranjeros (5.5 por ciento del total) en sus universidades y muchas instituciones dependen en gran medida de sus pagos de matrícula.
En otro revés para el magnate, un juez decidió suspender una orden que impedía a Mary Trump hablar abiertamente sobre el libro altamente crítico que escribió sobre su tío, el presidente.
El juez Hal B. Greenwald, en Poughkeepsie, Nueva York, rechazó los argumentos del hermano, Robert Trump, de que Mary Trump no podía hablar públicamente sobre sus familiares debido a un trato al que los parientes llegaron para ponerse de acuerdo sobre la herencia del padre de ella después de que falleció.
El magistrado sostuvo que las causas de confidencialidad en el acuerdo de 2001, “vistas en el contexto de las circunstancias actuales de la familia Trump en 2020, ‘…ofenderían las políticas públicas como una restricción previa al discurso protegido…’”, refiriéndose a la libertad de expresión sin que sea afectada por las regulaciones gubernamentales y la censura.
Prohibirle actuar a Mary Trump en esta coyuntura sería incorrecto y no serviría de nada. Sería irrelevante
, escribió el juez.
Respecto de la parte no confidencial del acuerdo, las relaciones de la familia Trump podrían ser más interesantes ahora en 2020 cuando se avecina una elección presidencial
, manifestó el juez.
El magistrado escribió también que Robert Trump no había demostrado ningún daño que la publicación del libro le causaría a él o al público, pues es pocas veces mencionado en el texto.
Mary Trump, sicóloga y la única sobrina de Donald Trump, escribió en el libro que no tiene “ningún problema en llamar narcisista a Donald: cumple con las nueve características enlistadas en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales”.
El juez levantó órdenes que había emitido y que impedía temporalmente a Mary Trump y a la casa editorial Simon & Schuster publicar o distribuir el libro acerca del presidente. Un juez de apelaciones ya había levantada la orden concerniente a Simon & Schuster.
El libro, titulado Too much and never enough. How my family created the world’s most dangerous man (Demasiado y nunca suficiente. Cómo mi familia creó al hombre más peligroso del mundo), comenzó a venderse ayer.