Por Hugo Reyna/ EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Candelaria Espinosa López es una mejor de mediana edad que todas las tardes sale de su casa en la Zona Centro y en transporte se traslada a la Avenida Alcalá en Fraccionamiento Balcones de Alcalá, en donde se coloca a la entrada del Parque Industrial del sector para solicitar una ayuda económica.
Podría ser una estampa cotidiana más, como muchas más en la gran ciudad, pero ella tiene una particularidad, su incapacidad y razón de movilizarse en una silla de ruedas, es por causa de su destino que cambió trágicamente hace 4 años.
En el 2016 fue arrollada por un auto en la Lateral del Canal Anzaldúas, el presunto responsable evadió su responsabilidad y la dejó a su suerte.
Como secuela sufrió la fractura de la pierna derecha, pero hace un tiempo el hueso (fémur) comenzó a desviarse de su colocación normal y se “salió” de su línea corporal, provocando una anormalidad que requiere de cirugía correctiva.
Candelaria ha buscado atención médica y apoyo, pero la emergencia sanitaria en proceso por Covid 19 concentra la atención y servicios, por lo que no hay tiempo para atenderla a ella.
Efectuó un llamado, solicitando la ayuda para corregir la anormalidad de su pierna y poder volver a caminar como lo hacía antes de aquel infortunado accidente que ocurrió hace 4 años.
