Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Hablando fuerte y conciso el Gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, hizo una amplia exposición de la problemática que existe en materia de infraestructura, seguridad pública, energías renovables, disposición de agua y presupuesto federal.
Culpó en el acto y sin rodeos al Gobierno Federal de mantener una política contraria a los intereses de los tamaulipecos y anticipó que se podría promover incluso una controversia constitucional en materia presupuestal, ya que para el 2021 habrá un recorte del 7% en términos reales para Tamaulipas, mientras que el gobierno central gozará de un 5% más; propiamente dijo que Reynosa dejara de recibir 7 mil millones de pesos que ya tenía etiquetados para diversas actividades.
Al hablar del agua, dijo que su Gobierno no permitirá que se traslade el conflicto de Chihuahua a Tamaulipas y exigió que se cumpla con la entrega del líquido pactado en el Tratado Internacional del 44 para los agricultores del Distrito 025.
Convocó a la Directora de la Comisión Nacional del Agua, Blanca Jiménez Cisneros para que venga a Tamaulipas y enfrente el grave problema que tienen los productores de esta región del noreste del país.
Sobre la Seguridad Pública, García Cabeza de Vaca aseguró que la medida de tomar el control temporal de la policía de Matamoros se debió a que las autoridades locales fueron omisas en atender los bloqueos causados por supuestos grupos de la delincuencia organizada durante los primeros días de este mes.
Expuso que el grupo de Élite (GOEPS) recién integrado debía cumplir con una orden de aprehensión contra un capo que opera en ese Municipio, y este respondió con bloqueos y puso en riesgo la seguridad de la población.
No obstante, a pesar de que Tránsito Municipal fue llamado a actuar, las autoridades municipales prefirieron permanecer al margen.
El jefe del Gobierno de Tamaulipas expuso que se presentarán las denuncias penales correspondientes caiga quien caiga, en relación con esos hechos.
“En Tamaulipas no somos dejaditos”,-expresó, al referir que existe voluntad política para enfrentar esa problemática.