Londres, Inglaterra.- Tras la llegada de Edouard Mendy, Kepa Arrizabalaga está sentenciado en el Chelsea, equipo que buscó recuperar lo invertido en el portero español, pero no encontraron equipo interesado en ficharlo, ni préstamo.
Los Blues se negaron a tomar un golpe financiero por el arquero que pagaron 80 millones de euros en 2018, pero pedían poco más de 65 millones de euros y ni un club estuvo dispuesto a soltar esa cantidad, de acuerdo con The Sun.
La siguiente opción fue buscarle acomodo a préstamo, pero la traba ahora fue el salario de alrededor de 5.5 millones de euros anuales, algo que tampoco estuvieron dispuestos tras la crisis económica que dejó la pandemia de COVID-19.
Ahora el cuadro que dirige Frank Lampard deberán analizar si están dispuestos a cederlo pagando al menos la mitad del salario del arquero de 25 años, sino deberá estar en la banca durante la temporada 2020-21 de la Premier League.