Ciudad de México.– El Senado de la República remitió esta madrugada al ejecutivo federal, para su promulgación, el proyecto de decreto que reforma la Ley de la Industria Eléctrica, luego de que la minuta se aprobó, tanto en lo general como en lo particular, en el pleno de esa cámara del Congreso.
La iniciativa preferente del presidente Andrés Manuel López Obrador concluyó así el proceso legislativo en el Congreso federal, casi un mes antes del plazo establecido en la Constitución y con la reiterada advertencia de PAN, PRI, MC y PRD de que acudirán a una acción de inconstitucionalidad.
“Son los nuevos Miramones y Mejías, que quieren entregar el país a los intereses extranjeros”, les recriminó el senador de Morena, Napoleón Gómez Urrutia, durante la sesión a distancia, a través de una plataforma digital.
La reforma fue aprobada en lo general y en lo particular por Morena, PT y PES, luego de una discusión de más de nueve horas, en que la oposición repitió una y otra vez que la reforma viola disposiciones de la Carta Magna y tratados internacionales firmados por México.
En tanto, senadores de Morena y sus aliados, refrendaron que las modificaciones se apegan en todo momento al marco constitucional y acusaron a los opositores de defender los intereses de las empresas trasnacionales a las que gobiernos anteriores pretendieron cederles la industria eléctrica.
Después de a discusión en lo general, panistas, priístas y senadores del PVEM aprovecharon el debate en lo particular para repetir las críticas a la decisión de rescatar y fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Aunque la iniciativa sólo modifica nueve artículos e introduce cinco transitorios a la Ley de la Industria Eléctrica, se presentaron 162 reservas, es decir propuestas de cambio, ya que no importó que fueran los mismos ordenamientos, rechazados una y otra vez, porque ello permitió que 46 legisladores, mayormente de la oposición, pudieran hacer uso de la palabra.
Los senadores de Morena refrendaron que las modificaciones son constitucionales. “Han repetido hasta el cansancio mentiras, para tratar de ocultar que lo que realmente les preocupa es que sigan los negocios de las trasnacionales eléctricas, a costa de la quiebra de empresas del Estado. No les importa la soberanía nacional”.
Igualmente, el senador morenista Salomón Jara advirtió que no se dejarán «asustar con el petate del muerto» mientras panistas y priístas reiteraban su rechazo a que se fortalezca la CFE.
“No más subsidios a las trasnacionales”, agregó José Narro, también de Morena.
Sesenta años después de que el presidente Adolfo López Mateos nacionalizó la industria eléctrica, “nos encontramos discutiendo, después de una larga travesía de traidores a la patria que entregaron nuestros recursos a los extranjeros”, una iniciativa que “es indispensable asegurar nuestra soberanía energética”, resaltó la senadora Ana Lilia Rivera.
A la una de la madrugada, el presidente del Senado, Eduardo Ramírez, declaró aprobada la minuta y la remitió al Ejecutivo federal. “!Viva el presidente López Obrador, cabrones!!!”, gritó la morenista Lucía Trasviña.
En su página electrónica, el coordinador senatorial de Morena, Ricardo Monreal, escribió: «Fortalecer a la CFE ayudará a evitar el desmantelamiento de las instituciones del Estado”.