Ciudad de México.- El 5 de marzo del 2020, autoridades de la Ciudad de México detuvieron a Renato Ibarra, entonces futbolista del América, por presuntas agresiones físicas y verbales en contra de su pareja, Lucely Chala, situación que lo llevó a prisión algunos días y a la postre su separación de las Águilas.
Hoy, poco más de un año después, el ecuatoriano ha dado carpetazo al asunto y este lunes quedó formalmente absuelto de la acusación tras acudir al Reclusorio Oriente de la Ciudad de México a finiquitar el caso.
Sin dar declaraciones, el volante fue acompañado por su familia, ingresó al penal y salió minutos después de firmar su absolución.
El que sí habló fue el abogado de la parte acusadora, quién aseguró que el futbolista ha estado cumpliendo con lo establecido en el acuerdo que le dio la libertad.
«Dimos cuenta que se ha dado cumplimiento a la reparación del daño que se había pactado, fue todo y se da por terminado el asunto. La reparación del daño consistía, «en lo que se había quedado anteriormente, darle un departamento a su familia, pero ya cumplió», en palabras recogidas por El Universal.
Además del acuerdo económico con Chalá, Ibarra también se comprometió a hacerse cargo de la manutención del hijo que tienen juntos y acudir a clases de civismo y educación. En redes sociales, varios videos y fotografías han comprobado que él y Chalá han estado juntos, pero se desconoce si hubo reconciliación formal.
Días después de su detención, Renato salió de la cárcel y en verano fue firmado por Atlas, donde este fin de semana marcó el gol con el que la Academia derrotó a Xolos, se afianzó en zona de Liguilla y de paso salió del último lugar de la tabla porcentual.
