Ciudad de México.- Lucas Hernández, quien en el futbol mexicano se tiene muy presente por su reciente encuentro con André-Pierre Gignac en el Mundial de Clubes, habló en entrevista a Le Parisien y contó la desgarradora historia de vida en la que su padre lo abandonó.
El jugador del Bayern Múnich sufre aún por ese pasado, en el que Jean-François Hernández, su padre biológico, se marchó.
Hernández ha tenido éxito en Europa, militando en el Olympique de Marsella, el Toulouse, Atlético de Madrid y actualmente en el Bayern.
Sin embargo, su carrera no ha hecho que se olvide de ese abandono, ya que lo dejó a él y su hermano Theo con su madre en 2001, cuando el futbolista tenía cinco años de edad.
«Biológicamente es mi padre, pero nunca lo consideraré de esa manera. La llegada de Martín me permitió lograr algo muy simple. Lo más importante en mi vida es mi hijo. Hago todo por él», menciona el francés, quien fue padre en 2018.
El futbolista que se vistió con la playera de Tigres que le obsequió Gignac, pretende conquistar con Francia la Eurocopa que se le escapó en la final en 2016.
No conocían a Gignac en persona
Para el Mundial de Clubes que se celebró en 2021, Gignac y Hernández tuvieron una plática digital, y fue hasta el día del partido de la Final que se conocieron, pues aunque ambos militaron en el Marsella, no alcanzaron a coincidir.