Ciudad de México.- Quizás no sea caminando, pero la Selección Mexicana está teniendo un buen inicio en la eliminatoria en el Octagonal de la Concacaf con dos triunfos seguidos, luego de vencer primero a Jamaica en el Azteca y ahora a Costa Rica en San José por marcador de 1-0, colocándose en lo más alto de la clasificación.
Pese al resultado, el combinado azteca volvió a sufrir de más para poder amarar el triunfo, ya que en los últimos minutos del encuentro el Tri estuvo muy cerca de terminar el juego con un empate, ya que en una jugada de mucho peligro Fuller sacó un disparo que pegó en el poste de la meta de Memo Ochoa; mientras que en otra acción los ticos sacaron un centro que se quedaron a centímetros de empujar al fondo de la meta tricolor.
Sin embargo, un penal ejecutado de manera magistral por parte de Orbelín Pineda fue suficiente para doblegar a Keylor Navas y a una selección tica que está teniendo demasiadas complicaciones en este nuevo proceso, ya que solo ha sumado un punto en dos partidos.
El juego fue trabado, México tuvo la pelota la mayor parte del tiempo, pero les faltó un poco de claridad, fue ahí, donde a diferencia de otras ocasiones no hubo desesperación y la calma fue clave para el triunfo.
Antes de que terminara el primer tiempo México sufrió la baja de Alexis Vega por una fuerte entrada sobre el tobillo derecho por parte de Bryan Oviedo e incluso tuvo que llegar al hospital.
Su lugar lo ocupó Orbelín Pineda, quien apenas entró al campo y al poco tiempo fue el encargado de ejecutar el penal que le señalaron al Tri a favor. Lo hizo sin temor de tener enfrente a Navas y lo hizo ver como un principiante con su cobro.
México supo llevar el partido, Costa Rica no parecía ser un rival complicado porque no les alcanzaba para mucho, pero sobre el final del partido fue que crecieron y pusieron en demasiadas complicaciones a los aztecas.
En la última jugada el conjunto tico se pudo llevar el empate, pero la pelota pasó de largo del marco de Memo Ochoa y el Tricolor salió con otros tres puntos que le dan un poco de tranquilidad para ir a Panamá y jugar el próximo miércoles en el Rommel Fernández.
