Ciudad de México.- El cambio climático es una amenaza para la paz y la seguridad global, así como para la supervivencia de la humanidad, sostuvo este jueves el canciller Marcelo Ebrard en el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Aseguró que “la única manera en la que podremos hacer frente al cambio climático es mediante el multilateralismo, con un enfoque integral y coherente a través de todo el sistema de Naciones Unidas”.
En un debate abierto sobre clima y seguridad convocado por Irlanda, que preside este mes el Consejo de Seguridad, Ebrard dijo que “hoy resulta irrefutable el hecho de que sus efectos pueden y están exacerbando conflictos ya existentes, como se observa en regiones como el Sahel o el Cuerno de África, y que está provocando impactos muy severos en un gran número de países”, afirmó.
Agregó que desde el inicio de la pandemia de Covid-19 ha quedado claro que las amenazas a la paz y la seguridad internacionales son multidimensionales, según información difundida por la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Expuso que el informe de 2021 presentado el 9 de agosto pasado del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático es contundente: la evidencia científica muestra cambios sin precedentes en el clima y la temperatura global y muy lamentablemente algunos de estos son ya irreversibles.
México coincide con la noción reflejada en la iniciativa del secretario general Nuestra Agenda Común sobre la necesidad de estar mejor preparados ante estos retos, lo cual implica considerar, en cualquier escenario posible, los efectos del cambio climático, o lo que se ha llamado la seguridad climática en el corto plazo.
Se congratuló de que el Consejo de Seguridad no evada el tema, pues consideró que su papel es fundamental si se quiere robustecer la arquitectura multilateral.
“El reto está en identificar oportunamente las situaciones y los espacios en los cuales los efectos del cambio climático pueden tener efectos multiplicadores que afecten la paz y seguridad internacionales y actuar a tiempo, tener una diplomacia preventiva de compromiso común”.
Una interacción más efectiva entre el Consejo de Seguridad y la Convención Marco sobre Cambio Climático o el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, y la integración de sus perspectivas a los análisis del Departamento de Asuntos Políticos de la ONU, enriquecería sustancialmente el contenido del informe quinquenal y la prospectiva estratégica que se adopte, dijo Ebrard.
El establecimiento del grupo informal de expertos sobre clima y seguridad dentro del Consejo de Seguridad fue un paso en la dirección correcta, afirmó. “Será necesario ahora capitalizar en los hechos sus recomendaciones, de esta forma, cuando se ajusten los mandatos de las operaciones de mantenimiento de la paz y de las misiones políticas especiales, el impacto de los efectos climáticos estará adecuadamente contemplado y se podrá ofrecer una respuesta oportuna e integral”.
Propuso que se incluya “la dimensión del seguimiento de las metas que nos proponemos y de cómo el financiamiento que se ha dispuesto o se dispondrá en la COP26 se va a llevar a cabo, para que no quede en declaraciones políticas, sino que sea un tema central respecto a la seguridad climática del planeta”.
Reafirmó el compromiso de México de combatir el cambio climático de manera conjunta con todas las partes interesadas para encontrar soluciones globales y multidimensionales.