Segundo Trimestre
El momento es hoy decía el subsecretario Hugo López Gatell, entramos al segundo trimestre del año; con declaratoria de emergencia por causas de fuerza mayor. Quedarse en casa es fundamental, aunque no para todos es posible.
Para mí esto es fase tres, 1215 caso confirmados y 29 decesos; se ha repetido hasta el cansancio “quédate en casa”. Sin embargo, la indisciplina financiera no lo permite; por otra parte hay alimentos para 100 días ¿Dónde es que están?
Apelan a la corresponsabilidad ciudadana, aunque la verdad; no se puede. En México se vive de los créditos, lo primero sería la suspensión de pagos. Todos los gastos de vivienda: hipotecas, luz, agua, gas e internet; también son sujetos de suspensión. Medicamentos para enfermos crónicos y despensa, ¿serian asumidos por el estado?; de otro modo no veo cómo puede la población ser cooperativa. Una vez resuelto lo anterior, aplicaría un toque de queda; hasta por tres meses.
Si me siento bien, por si alguien quisiera preguntarlo; el pico de la curva se vería en junio. El país no puede detenerse, sin las medidas adecuadas; los proyectos presidenciales deberían esperar. Si no vamos en similar dirección, no se puede.
La austeridad permitirá aplanar la curva de contagios, aunque es indispensable; que juntos sociedad y gobierno enfrentemos esta pandemia al tope de nuestras capacidades. Incluso en educación, este será; un ciclo; extraordinario.
Dije suspensión de pagos, no perdón de deudas. Dije deberían esperar, no cancelación definitiva. Esta es una situación atípica la cual reclama el sentido humano de todos, la responsabilidad de todos; México somos todos.
¿Qué más puedo proponer? Que actuemos juntos, noventa días serán pocos. Con voluntad y FE, todo es posible; la Biblia no solo se menciona se lee y se practica. No es este un mensaje apocalíptico, es un llamado a la unidad; México lo vale.
Nos podemos aislar, no treinta días; noventa si es necesario. El detalle es que cuando se está solo, se debe subsistir; el hambre es más grande que el miedo. Tiempo es de tomar otras medidas, no al encierro; si a la constante precaución.
El segundo trimestre pinta caótico, solo nos queda: la solidaridad, la FE y la precaución. Salgamos solo lo más indispensable, que este sea un curso intensivo de supervivencia; si podemos. “por ti, por mí y por los nuestros; se paciente y Ora”