Se le chispoteó a la 4T.
Después de ver todas las andanadas en su contra, por la fuerte corrupción destapada en el aeropuerto Felipe Ángeles, llamado así la base militar de Santa Lucía, que pasó de militar a civil, a ser considerada para servicio aéreo internacional, como una nueva terminal aérea una vez que se canceló la terminal de Texcoco, por actos de corrupción, que a la fecha está saliendo lo mismo pero más a fondo en el ámbito de corruptelas.
Para eso y otras linduras, se decretó que la base Militar de Santa Lucía, por ser de las fuerzas armadas, era de seguridad nacional, y surcos se decretó su construcción como tema de seguridad nacional, y sus obras y contratos serán secretos, y nadie de lo civil podrá escudriñar en sus laberintos, dejando contratos, adjudicaciones y todo en manos del gobierno, sin que la ciudadanía pueda investigar o cuestionar su costo y las ya empresas fantasmas que ahí facturaron, dicho sea de paso con este “DECRETAZO” el presidente López Obrador, sepulta su combate a la corrupción y su mayor legado según sus propias palabras.
Pero por si fuera poco, también se incluyó a la refinería de Dos Bocas en Tabasco, y al Tren Maya, como temas de seguridad nacional, con este decreto el presidente evita controversias constitucionales, demandas y reclamos por la opacidad en sus construcción y contrataciones de empresas, es decir, ya publicados en el diario oficial de la federación, el mandatario no dará explicación a nadie de cómo y con quien hace los negocios en estas magnas obras.
Pero apenas acababa de dar el decretazo para tapar toda la corrupción de las magnas obras de la 4T, y salió a relucir el escándalo de Tamaulipas, otra vez Tamaulipas dijo, y lo único que comentó es “Vamos a investigar” y se acabó el tema, que trae a todos en una alberca de estiércol.
Las fotos e imágenes de los aviones privados, de la camionetas blindadas, de alcaldes y diputados federales, hacen ver que la corrupción de la 4T en Tamaulipas, estaba a fondo y con todo, que el financiamiento de ese origen mantenía la fortaleza del partidazo, y que sus actores hoy en día, esconden la cabeza y dan argumentaciones insólitas tratando de limpiar su embarrada imagen de honestos.
Andan tan las mal las cosas, que el reynosense Héctor Garza, el Guasón, afirma que irá en la encuesta, y si así fueran las cosas, la pregunta más seria sería ¿para qué sirvió la convocatoria? Si sin lugar a dudas Mario Delgado, usó la convocatoria como papel sanitario, y ya esta elección interna resulta ser un verdadero sepelio anticipado.
A tal grado han llegado las cosas, que nadie busca a los asesinos (al menos así parece) si no se van con el difunto y sus nexos con la política tamaulipeca, dejando claro que le importa más al gobierno federal tapar sus corruptelas, que darle cristiana sepultura al difunto.
Ya los desdeñados por la Comisión Nacional de Elecciones, andan con los arrojos bien puestos, a sabiendas que los elegidos en la primera fase salvo uno o una podrá salvar la aduana de los acontecimientos, y se pusieron las pilas para sacar agua del pozo, quizá por eso Héctor Garza, sigue pidiendo a gritos estar en la encuesta, y Adrián Oseguera, alcalde de Madero, está dispuesto a hacer el sacrificio de ser el candidato por Morena en la contienda del 2022.
Las circunstancias han cambiado, lo que parecía un día de campo para los morenos, se ha convertido en una verdadera pesadilla, la democracia interna pisoteada y la convocatoria llena de estiércol, no hay momento peor para el partido en su corta historia en la entidad, y por si fuera poco, los que habían quedado fuera, solitos se metieron la perol del aceite hirviendo, haciendo alusión al viejo refrán “explicación no pedida, es culpa aceptada”.
La bola blanca cambio de jugador, y la mesa de billar está preparada para una carambola de tres bandas, pero con otro color y otra trilogía de partidos.
Al tiempo.
De Aquello y lo demás…
El alcalde de Matamoros, Mario López Hernández, podría ser el fiel de la balanza en un enroque por la sucesión gubernamental, ganando su elección con muchos votos (102 mil) y dejando claro que el bastión de Morena está en Matamoros, y por si fuera poco ileso de los últimos acontecimientos, donde casi todos los precandidatos salen salpicados.
Para el maestro López Hernández, la paciencia ha sido su mejor virtud, sin desesperarse, y sin perder el momento político que vive, regreso a sus labores como edil de Matamoros, las circunstancias lo ponen de nuevo en una posición favorable y el dan a Matamoros, de ser de nueva cuenta protagónico en la sucesión gubernamental.
Sin aspavientos y con serenidad el alcalde matamorense, no pierde tiempo en supuestos, los momentos cambiaron y el momento político dio un giro que lo coloca como un serio aspirante a la gubernatura de la entidad.
chanorangel@live.com.mx
