Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Se le recordara siempre por su franca sonrisa, por su gran don de gentes, por su infinito amor a su familia y por el trato respetuoso a sus compañeros y amigos sindicalistas.
Él fue Irving Valero Alfonso, quien por espacio de más de 8 años colaboró en el Sindicato Industrial Autónomo de Maquiladoras de Reynosa y su hermano, el sindicato nacional SIAMARM, que también tiene su sede en esta frontera.
PROHIBIDO RENDIRSE
De una sola pieza, Irving fue un valiente guerrero que motivado por el líder de este gremio Alberto Lara Bazaldúa, nunca dejó de estudiar, de prepararse para servir mejor y recién había culminado su carrera en leyes cuyo título hoy mismo le sería entregado. Sus tareas habituales las combinaba con su honroso cargo como delegado y funcionario de varias plantas entre ellas SANMINA, NVENT y DLH BOWLES ubicadas en Parque Industrial del Norte y Parque Villa Florida, donde brilló como gestor social.
La madrugada de este miércoles 9 de febrero, estando en si hogar ubicado en la colonia Bugambilias, sobrevino un ataque fulminante al miocardio que cortó de tajo la fructífera existencia de Irving.
COMBATIÓ A LOS BUITRES
Valero Alfonso, siempre fue fiel a sus principios y en febrero del 2017 al lado de la razón y sus más recios compañeros, soportó la brutal invasión de las instalaciones de SIAMAR, a cargo de “piratas” y esquiroles que llegaron para posesionarse del patrimonio sindical como viles buitres.
Irving, junto con un puñado de directivos al lado de Lara Bazaldúa, jamás se replegaron y durante un año y 8 meses realizaron la excelsa defensa de sus derechos laborales hasta lograr que en noviembre de 2018, la Secretaria de Trabajo y Previsión Social a través de la Junta Federal de Conciliación les otorgara el reconocimiento y con ello, el fallo favorable para reinstalar al comité ejecutivo, echando fuera a los espurios.
HACIENDO HISTORIA
El sacrificio de esa pléyade de trabajadores de la línea forma parte ya de la historia sindical escrita con letras de oro y de la que este joven directivo formó parte activa junto con otros líderes aún vigentes como Byron Cavazos Tapia, Eduardo Jiménez López, Ricardo Escobedo Zúñiga, Juany Cazares, Nereida Rodríguez, Samuel Gloria Segovia, José Luis Alemán Rodríguez, Juan Jardines, Miguel Ángel Hernández, Raymundo Lee Jacome, Modesto Buenavista Cano, el hoy licenciado Carlos Galindo, Mario Eduardo de la Torre, Gilberto Sánchez, Nicolás González, Jorge Méndez Juárez, Adrián Zavala, Tahiry Barrón, Lulú Rodríguez, Félix Escobedo Dionicio, Luis Alberto “Payasote” López, José Méndez, Gerardo Pérez, Atanasio Martínez, Jorge Méndez “El Junior”, Ismael Zaleta, Jesús Ortiz, David Herrera, Rolando Ortiz, Alberto Camacho, Moisés Arán, Santos Tapia Campechano, Martín Cabañas (+), Macario Yerena (+), Adolfo Plata (+), Imelda Santos, Edy Quintanilla, Gustavo Espinosa, Roberto Bautista, y muchos otros más que ya se han ido y otros que desde adentro y desde afuera, participaron de esta gesta y a quienes por nuestras limitantes no podemos recordar.
Desagradablemente hoy el compañero ha partido, pero queda en la mente de cada uno de sus compañeros y representados, la honorabilidad y nobleza de su misión y sus actos.
Antes de fallecer formó parte de la misión que acudió a Veracruz a apoyar a los hermanos jarochos, con motivo de un grave fenómeno climatológico del año anterior.
LO DESPIDEN HOY
Ni el más florido discurso podrá elogiar u homenajear con justicia la grandeza de su legado.
Sus restos se están velando desde hoy en el Funeral Valle de la Paz, de Bulevar Morelos, de donde partirán mañana el cortejo fúnebre para brindarle cristiana sepultura a las 14.30 horas en el panteón Español.
Que en paz descanse Irving Valero Alfonso.