Por Juan Carlos Rodríguez Terrazas/EL SINODAL DE TAMAULIPAS
Reynosa, Tam.- Una tranquila rueda de prensa en la que el sub delegado Medico del ISSSTE de Tamaulipas, doctor Ernesto Hernández Lavín daba a conocer a los medios de información sobre un programa de vacunación de refuerzo contra el COVID 19, se convirtió en el escaparate para recibir múltiples y reiterativas denuncias en contra del director de la clínica “Baudelio Villanueva”, Dr. Juan Héctor Briceño González.
Y es que fue esta la única forma en que los trabajadores del instituto encontraron para hacerse escuchar por el funcionario estatal, que si bien fue honesto en el sentido de que no está en sus manos resolver todas las anomalías en que incurre su subalterno, al menos tuvo la atención de escucharlos y tomar nota para dirigirse a la superioridad para hacer el último intento por meter en cintura al mal funcionario.
El doctor Rubén Inclán, como parte del juicio sumario de inconformes contra Briceño González, de plano emplazó al sub delegado médico para que saque de la dirección al médico, antes de incurrir en acciones extremas como la toma de la oficina de la dirección (sin afectar a derechohabientes) para evitar que siga haciendo males en perjuicio de los trabajadores, la mayor parte de ellos con 15 y hasta 40 años de servicio.
DECEPCIONANTE
Por su parte el doctor Alfonso De León Perales, Secretario de Educación del SNTISSSTE en la Zona Norte del país, dijo sentirse muy decepcionado con su compañero, al que le quedó muy grande el puesto ya que comete arbitrariedad tras arbitrariedad, sin tomar en cuenta que en breve volverá a su base como anestesista de la clínica y requerirá que el sindicato le defienda sus derechos laborales.
Entre las muchas anomalías que existen en la institución está que solo 9 médicos se encuentran dando consulta en los dos turnos de servicio cuando existe una plantilla de 21 facultativos, careciendo de especialistas, por lo que ellos mismos deben asistir a clínicas particulares a atenderse cuando enferman, porque no hay capacidad activa en su hospital.
Las quejas menudearon por decisiones absurdas como la de cerrar el estacionamiento al personal atravesando una ambulancia, adueñándose de los cajones existentes ó denunciar ante la FGR a una trabajadora por hacer un tik tok, aduciendo que era el propio Hernández Lavín el que lo había ordenado, siendo desmentido de este hecho en su propia cara.
“LINDEZAS”
Lo acusaron además de misoginia, nepotismo, Tráfico de influencia, no respetar bolsa de trabajo y favorecer solo a su familia, amigos y recomendados. Por perder el servicio de banco de sangre, clausurado por COFEPRIS y en general el pésimo ambiente de trabajo y falta de liderazgo del jefe local del cuerpo de gobierno, que redunda en mal servicio médico y administrativo.
Mencionaron la carencia de insumos hasta en los servicios sanitarios, Rayos X, laboratorio, lavandería, mantenimiento, falta de material médico, de medicamentos en farmacias.
También se reportó que la encargada de recursos humanos no resuelve situaciones a su cargo, indicado que Elda Fraga Pineda llega a la hora que le da su gana, siempre de mal humor y maltratando personal de menor jerarquía como intendentes, gente de mantenimiento, cocina, camilleros, vigilantes externos, etcétera, inclusive dándose el malsano gusto de autorizar pagos de interinatos que a la vuelta de los días se niega a contratar.
GROTESCO
La negligencia administrativa si bien ha existido siempre, se ha agudizado durante el periodo de Briceño González, quien con desfachatez hacia señales grotescas a su jefe para que cortara la charla con los trabajadores, interrumpiendo constantemente, insistiendo hasta por teléfono sobre una supuesta reunión que tendría con otros empleados a esa hora.
Se denunció que funcionarios estatales han ido quitando plazas de jefaturas para asignarlas a otras ciudades sin importarles que aquí sea una ciudad con uno de los mayores números de derechohabientes con 40 mil, para quienes no hay capacidad numérica para atenderlos.
El acoso laboral y la violación de derechos individuales por parte del director le fue restregada una y otra vez, mientras este estúpidamente seguía haciendo señales obscenas que fueron captadas por los diversos medios de comunicación que habían acudido al hospital a una conferencia y se toparon con la falta de criterio y profesionalismo de este remedo de burócrata.
GUARURAS
Cabe citar que durante la presentación de las innumerables quejas contra el director, empleados suyos tomaron fotos y videos del personal denunciante con el propósito de intimidarlos, cosa que no ocurrió porque con mucho valor civil estos siguieron denunciando virilmente las irregularidades y señalamientos que aun pudiendo resolverse ahí mismo no les son recibidos.
Como es su costumbre José Luis Chávez Araiza, quien es el delegado local del sindicato de trabajadores del ISSSTE, brilló por su ausencia y se dedicó a espiar a quienes deben ser sus representados, tomándoles fotos y enclaustrándose en su oficina.
Antes de retirarse Hernández Lavín, recibió una copia del oficio de denuncia contra el director de la clínica, dirigido al Presidente Andrés Manuel López Obrador y al director general de este sistema médico, que contenía las firmas de un gran número de trabajadores e hizo un recorrido a los patios de la clínica, donde constató las acusaciones, comprometiéndose a hablar con su inepto director para hacerle ver algunas consideraciones personales sobre su comportamiento.